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El coordinador general de Tierras y Bienes Patrimoniales de la Provincia, Sergio Usandivaras, partió de dos premisas. “En primer lugar, esas tierras son inhabitables. Y segundo, Tierra y Hábitat negocia y busca soluciones cuando dejan de ocupar las tierras”, dijo.
Según el funcionario las tierras de los Manero son propensas a las inundaciones y no tienen ningún plan de desarrollo urbanístico en ese lugar.
Reconoció el desesperante déficit habitacional histórico en la zona y dijo que estas situaciones son propicias para los “avivados de siempre que hacen negocios con la necesidad de la gente”.
Robustiano Manero fue el fundador de Colonia Santa Rosa y de sus propiedades salieron las tierras para lo que hoy es el pueblo. Al fallecer Robustiano, la herencia fue repartida entre sus hijos. Entre ellos, a Robustiano hijo le tocó en suerte la finca actualmente usurpada. Cuando falleció en 2008, la que enfrentó la situación es su viuda, Mirta de Manero.