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Sergio Tapia
La profesora de Biología María Angeles Canto (38) vivió la peor noche de su vida, al ser secuestrada el miércoles a las 23 por tres sujetos que le robaron el auto y luego la abandonaron en una zona rural. La docente trabaja en diferentes secundarios y terciarios de Gemes. “Me abordaron cuando descendía de mi VW Gol rojo (dominio FIC 418), en la vereda de mi casa (barrio 25 de Mayo) y me obligaron a reingresar al vehículo. Me empujaron, me apuntaron con una pistola y me dijeron que no hiciera ni dijera nada”, contó.
Recordó que una Kangoo bordó nueva llegó casi al mismo tiempo que ella a su domicilio, se detuvo en la vereda del frente y esperaron que ella bajara para abordarla. “Cuando vi la camioneta no me pareció extraño, luego todo fue muy rápido”, explicó. Dos de los maleantes subieron a su automóvil, uno al volante y el otro junto a ella, en el asiento de atrás; el tercero los siguió en la Kangoo y salieron de la ciudad. “No sabía adónde me llevaban. Estaba aterrorizada; no quería ni mirarlos. Decían que no sabían que iban a hacer conmigo. Pensé que me matarían. Entramos por la ruta 10, rumbo a Aguas Calientes. Todo era oscuro. De repente pararon y me permitieron bajar. Solo retuvieron mi celular. Caminé hacia Gemes y me crucé con una persona, le pedí ayuda y juntos hicimos dedo a una camioneta, que nos llevó a Gemes”.