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Conmoción en Tartagal. Un hombre identificado como Julio Torrico, de 56 años, fue hallado completamente calcinado ayer a las 16.30, por el dueño de una vivienda donde trabajaba de casero y que fue incendiada al aprecer en forma intencional.
El terrible hecho se habría desencadenado 20 días atrás, según comentó el dueño del hogar, Raúl Juárez (50), a El Tribuno, cuando su examante, una mujer identificada como Patricia Argentina Piedra, no soportó que Juárez haya terminado la relación extramatrimonial con ella y le dijo: “Voy a incendiar tu casa y te voy a cagar quemando por hijo de p... al igual que todos los que estén adentro”.
Sin embargo, el hombre, remisero de una empresa local, no le prestó mayor importancia y siguió con su rutina diaria, intentando recuperar a su esposa, quien se encuentra con sus dos hijos varones (de 4 y 10 años) en San Salvador de Jujuy.
El sábado a las 20, Juárez decidió salir a trabajar y dejó su vivienda, situada en calle Echeverría 447, del barrio Villa Güemes a cargo de Torrico, quien desde hace cerca un año, se ganaba unos pesos trabajando de casero en la morada del remisero, mientras el hombre conducía el remis. Pero poco después -según testimonios de los vecinos de la zona- se presentó Patricia Piedra en la vivienda de Juárez con un bidón de nafta en mano, para después consumar el incendio.
De inmediato, los testigos se comunicaron con el Sistema de Emergencias 911 y uno de ellos también se dirigió hacia la empresa de remises, situada en el microcentro de Tartagal, donde le informaron a uno de los compañeros de Juárez sobre el hecho.
Momentos más tarde, el damnificado fue alertado mientras se encontraba con un pasajero en el barrio de Villa Saavedra y luego se trasladó a su domicilio.
En el lugar, sus vecinos le explicaron lo sucedido y él le comentó el hecho a la Policía que aún continúa buscando a la supuesta autora del hecho.
Sin consuelo
“Perdí todo, tenía tres dormitorios, un hall, un baño y una cocina. Era una vivienda humilde, pero tenía todo lo que necesitaba y ahora quedé en la calle sin nada. Mis hijos no van a tener su casa, es injusto”, gritaba, entre llantos, el remisero, horas antes de encontrarse con el cuerpo calcinado de su amigo y empleado Julio Torrico.
No vieron el cuerpo tras el peritaje
Increíble. Tras haberse denunciado el incendio, un grupo de efectivos policiales y de Bomberos de Tartagal se dirigieron hasta la vivienda afectada y realizaron las tareas correspondientes, durante la madrugada de ayer.
Sin embargo, el damnificado Raúl Juárez, dueño de la vivienda, esperó a los peritos hasta ayer a las 14, momento en que llegaron a realizar las labores y momentos después se retiraron, para recién dejarlo ingresar a retirar los escombros.
Durante ese trayecto, Juárez, observó unos pies debajo de una chapa y cuando la quitó, se dio con la lamentable novedad de que se trataba del casero de su vivienda, Julio Torrico, completamente calcinado.
De inmediato, el hombre llamó nuevamente a la Policía y a partir de ese horario no lo dejaron ingresar más a lo que quedó del terreno quemado.
Los peritos volvieron y revisaron el cuerpo, para luego trasladarlo a la morgue del hospital Juan Domingo Perón, de la mencionada localidad.
A raíz del hallazgo, los uniformados se comunicaron con sus pares de la Brigada de Investigaciones, quienes empezaron a seguir los pasos de Patricia Argentina Piedra, la supuesta autora del incendio, aunque por el momento sin resultados positivos.
El damnificado aseguró a los brigadistas que Piedra es conocida como “La Patito” y reside en el barrio Santa Rita, a escasos metros de la vivienda incendiada.
El hombre también comentó que la mujer es alcohólica y drogadicta y que por lo general se encuentra en los descampados de la zona.