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Efectivos de la división policial de Lucha contra la Trata de Personas y Asistencia a las Víctimas detuvieron ayer a un especialista en informática del Ejército Argentino, que se especializaba en sacar fotografías de sus partes íntimas a niñas y adolescentes y que recorría establecimientos educacionales, campos deportivos y gimnasios, captando imágenes clandestinas de las menores.
El sujeto fue identificado como Luciano Nicolás Díaz Vanolli (25) y fue capturado cuando ejercía uno de sus habituales patrullajes a la salida de un establecimiento educativo enclavado en la intersección de la avenida San Martín con el pasaje Suipacha.
El sospechoso, luego de una serie de denuncias recibidas por padres y madres de numerosas estudiantes, y tras una tarea de inteligencia de los integrantes de esa unidad especial, fue detenido al ser considerado incurso en los delitos tipificados en el artículo 128 del Código Penal, referidos al que “produjere, financiare, ofreciere, comerciare, publicare, facilitare, divulgare o distribuyere, por cualquier medio, toda representación de un menor de dieciocho (18) años, dedicado a actividades sexuales explícitas o toda representación de sus partes genitales con fines predominantemente sexuales, al igual que el que organizare espectáculos en vivo de representaciones sexuales”.
El sujeto había sido observado por matrimonios que iban a buscar a sus hijas a diversos centros educacionales y deportivos, como el Legado Güemes, donde el hombre -munido de una cámara de última generación y tipificada como “profesional”- obtenía sus materiales, mayoritariamente primeros planos de sus partes pudendas.
Ante la reiteración de sus incursiones, los padres de familia pusieron en alerta a la Policía. Todos coincidieron, sin conocerse entre sí, en señalar a un sujeto joven que se desplazaba en un auto Renault Megane bordó con vidrios polarizados, tomando fotos a las menores, apuntando a sus entrepiernas, colas y pechos.
Tomó intervención en el caso el fiscal Penal 1, Federico Obeid, quien dispuso el secuestro de la cámara y celular de Díaz Vanolli y su envío al Cuerpo de Investigadores Fiscales (CIF) para su análisis.
Asimismo, la jueza Correccional Sandra Mariela Espeche ordenó el allanamiento de su casa, en barrio Alborada, donde hallaron miles de fotografías propias de menores, cientos de artículos de pornografía infantil y pedofilia, almacenados de manera digital y en papel.
“Era tal la cantidad de material encontrado en el domicilio de este sujeto, en el barrio Alborada, en la zona oeste del Grand Bourg, que no descartamos su pertenencia a una red de pedofilia con fines comerciales o, simplemente, morbosos”.