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Hasta hace dos meses la violencia en la Argentina tenía cara de mujer, pero la política comenzó a cambiarle el rostro. En el país donde una mujer muere por día víctima de violencia de género, la dirigencia comenzó a ser el nuevo objeto de agresiones, golpes y hasta mortales ataques.
Los antecedentes aparecen muy aislados hasta hace un mes, pero desde el 22 de septiembre en adelante la violencia se convirtió en la nueva invitada e incluso protagonista de la campaña para dirimir cómo se conformará el Congreso Nacional por los próximos dos años.
Ese día, en medio de una caravana por La Matanza -hoy suelo político del Frente para la Victoria y uno de los distritos electorales más codiciados por el volumen de votos que concentra-, Sergio Massa y los otros candidatos del Frente Renovador recorrieron las calles de ese partido hasta que se toparon con un grupo que les lanzó piedras, huevos y hasta balas con gomeras. Una de estas golpeó al intendente de Tigre y principal referente de la oposición.
No fue la primera vez que Massa sufrió un hecho de violencia. A fines de julio le robaron en su casa y fue detenido un prefecto por ese hecho, que se hizo público recién el 5 de octubre.
El viernes 11 de octubre fue otro día negro para la política argentina. La casa del gobernador de Santa Fe, Antonio Bonfatti, fue blanco de una balacera. La vida del mandatario quedó a expensas de la suerte, ya que de las 14 balas disparadas, tres ingresaron a la vivienda y él junto a su esposa estaban en esos momentos en otro sector de la vivienda.
Ese mismo día, en la tarde-noche, el exgobernador de Chaco y actual candidato a senador por la UCR, Angel Rozas, fue salvajemente golpeado por una patota que ingresó a una radio de Villa Río Bermejito en el momento en el que era entrevistado. Los testigos vincularon el ataque al oficialismo provincial que lidera el mandatario ultrakirchnerista Jorge Capitanich.
El 19 de octubre de 2013 quedará en la historia de Lobería, la ciudad bonaerense en la que su intendente, Héctor Rodríguez, fue asesinado de dos disparos y, una vez ya fallecido, atacado a hachazos por un exfuncionario que había sido despedido un mes antes por supuestas irregularidades en su desempeño.
Al día siguiente, en el extremo sur del país, un hospital de Río Gallegos, la capital de Santa Cruz fue incendiado. Fue el segundo episodio de ataques a edificios provinciales, ya que el 18 de octubre el fuego había sido encendido en otras dependencias de la provincia que lidera el opositor Daniel Peralta. El mandatario denunció el último martes que el oficialismo nacional “busca un muerto” en ese distrito patagónico y puso la mirada sobre “mucha gente de afuera” que circula en esas lejanas tierras.
El comienzo de esta semana y a solo seis días de las elecciones legislativas nacionales, la violencia no cedió terreno. El lunes 21, dirigentes de la organización Tupac Amaru, que lidera la jujeña Milagro Sala cayeron en una emboscada que terminó con dos de ellos heridos. De la balacera participaron al menos diez personas, dos de las cuales ya estarían identificadas.
En el mapa argentino, la violencia preelectoral ya recorrió los extremos norte y sur, y dio varias pisadas en la zona centro. Quedan tres días para las elecciones, de los cuales dos estarán bajo el manto silencioso de la veda electoral. El domingo finalizará un período institucional extraordinario, ya que la violencia política le era ajena a la Argentina al menos desde 1983.
Los casos más resonantes
Domingo 22 de septiembre. La caravana que encabezaba el intendente de Tigre y candidato a diputado nacional por el opositor Frente Renovador, Sergio Massa, fue atacada a pedradas, huevazos y hasta con balas disparadas con gomeras. Una de las balas le pegó a Massa sin herirlo.
Viernes 11 de octubre. Era de noche. Dos motos se detienen frente a la casa del gobernador de Santa Fe, Antonio Bonfatti, y abren fuego. Dispararon catorce balas, tres entraron en la vivienda. El mandatario estaba en otra sala y salió ileso. Hay quienes vinculan el hecho a grupos de narcos.
Viernes 11 de octubre. Anochece en Villa Río Bermejito. El exgobernador de Chaco Angel Rozas es entrevistado en una radio local, como parte de su campaña como candidato a senador por la UCR. Una patota irrumpe en el estudio y golpea brutalmente al exmandatario y a otros candidatos.
Lunes 21 de octubre. Faltan pocos minutos para las 19. La columna de la dirigente jujeña Milagro Sala, candidata a diputada provincial, recorre el barrio Mariano Moreno de la capital. Un grupo la intercepta y abre una balacera. Hubo dos heridos y tres agresores habrían sido identificados.