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El dólar paralelo subió ayer ocho centavos a $8,40, en una rueda en la que “se reactivó” la actividad en el circuito informal, mientras en el segmento oficial el Banco Central compró unos 80 millones de dólares que sumó a sus decrecientes reservas.
“Se terminó la tregua con el Gobierno, las operaciones (en el circuito marginal) se reactivaron para satisfacer las necesidades de los inversores y de pequeños ahorristas que comenzaron a cobrar sus salarios y quieren huir del peso”, dijo un operador de la city porteña.
El dólar paralelo llegó a un máximo histórico de $8,75 el 20 de marzo, tras lo que -según fuentes del mercado- presiones oficiales lo hicieron retroceder a los $8,30 de anteayer, pero ayer volvió a recalentarse hasta 8,48 pesos y cerró en 8,40.
El dólar paralelo avanza 23,71% en el año, y registraba una brecha de 63,11% contra el que se ofrece a 5,15% en bancos y casas de cambio de la city porteña.
El dólar mayorista quedó plano a 5,134 pesos, en una rueda en que operadores estimaron que el Banco Central compró entre 70 y 80 millones de dólares. “El Banco Central aprovechó el ingreso de una importante orden de venta de YPF para cerrar la semana con un mejor nivel de compras netas, aunque está a la espera de las divisas de la cosecha de soja a partir de la segunda quincena para empezar a recomponer el nivel de reservas”, dijo un cambista.
Las reservas de la autoridad monetaria cayeron 6,57% o 2.844 millones de dólares durante el primer trimestre. El Banco Central cerró 2012 con 43.290 millones de dólares de reservas internacionales, pero al 27 de marzo esos activos estratégicos disminuyeron hasta 40.446 millones, su nivel más bajo desde 2007.