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25 de Junio,  Salta, Centro, Argentina
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Los salteños no confían en el peso, pero tampoco pueden acceder al dólar

Lunes, 03 de junio de 2013 11:11

A un año y medio de la restricción impuesta por la Casa Rosada, el dólar se aleja cada vez más del bolsillo de las familias salteñas. En contrapartida, la desconfianza sobrecarga al peso argentino que se erosiona con la inflación.

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A un año y medio de la restricción impuesta por la Casa Rosada, el dólar se aleja cada vez más del bolsillo de las familias salteñas. En contrapartida, la desconfianza sobrecarga al peso argentino que se erosiona con la inflación.

Según un sondeo que El Tribuno realizó en la capital salteña y en varios puntos del interior, el 90% de los mayores de 20 años afirmó no tener acceso a la divisa norteamericana. Independientemente de las clases sociales de los consultados, la mayoría optaría por considerar al dólar como un refugio ante la inflación y ante la plata argentina que se desvaloriza.

En los barrios, el impacto que generan en la economía familiar las continuas subas de la moneda extranjera no pasa del todo desapercibida. El 42% de los encuestados sostuvo que el movimiento del dólar no tiene incidencia en sus cuentas diarias, en su entorno, y se despreocupa de los incrementos, tanto del “verde oficial” como la marcada distancia del denominado “blue”.

Sin embargo, la mayoría cree que la devaluación del peso argentino seguirá con el tiempo, hasta se profundizará más.

La inflación

El 68% de los que participaron, consideró que la escalada inflacionaria, que padecieron en los últimos años, está ligada al comportamiento de la divisa norteamericana. Hay que tener en cuenta que sigue un retraso cambiario, ya que la suba de precios en el mercado interno (25% anual, según el Congreso) le sacó una gran ventaja a la cotización de la divisa de origen estadounidense.

Ante la imposibilidad de acceder a la moneda verde (Afip solo autoriza, y con fuertes limitaciones, cambiar para viajar al exterior), el mayor porcentaje de los salteños no dudó en afirmar que si tuviera unos cuantos dólares, los conservaría en concepto de ahorro para cambiarlos más adelante o para adquirir un bien, como una vivienda o un automóvil.

Paralelo

Más allá de los vaivenes del dólar “blue” (en dos meses pasó de $8 a $10 y ahora retrocedió a $8,75), manifestaron que sacarían partida en el largo plazo.

Entre los otros destinos que le darían a la moneda se encuentran los paseos al exterior. “Si tuviera dólares, los guardaría hasta que sea el momento para invertirlos. Me compraría un departamento o un auto”, expresó una estudiante de 21 años de la Universidad Nacional de Salta (UNSa) cuando se le consultó qué es lo que haría si tuviera dólares.

Ante la misma pregunta, la mayoría respondía que prefiere ahorrarlos en vez de gastarlos. Exponen su falta de confianza hacia el peso, que cada vez les alcanza para menos.

Interior

En el interior de la provincia, la situación no refleja un panorama diferente a lo que ocurre en capital.

Por una parte, los comerciantes y productores agropecuarios consideraron que la suba del dólar afecta a sus negocios porque los costos de algunos productos e insumos están fijados en esa moneda y la oferta al cliente se debe mantener muy por debajo del valor “real” del dólar.

Este grupo homogéneo, afirma que manejan con frecuencia la divisa tanto para la compra como para la venta y que incide directamente en sus inversiones. De cada cuatro consultados, la mitad dice haber recurrido a los famosos “arbolitos”, cambistas callejeros, para ahorrar esta moneda. Todos mencionaron que comprar dólares es la mejor opción para el ahorro.

Otro sector integrado por gente que trabaja en la administración pública, y con cierto poder de ahorro, señaló que los pocos pesos “juntados” los invertiría en dólares.

El resto de los pobladores, trabajadores de comercios, rurales o beneficiarios de planes sociales, afirman que les afecta su bolsillo porque “todo sube por culpa del dólar”, pero que no tienen una relación directa con la moneda norteamericana porque no tienen capacidad de ahorro.

Perjuicio

El comerciante se siente el primer perjudicado cuando el dólar sube, ya que el precio de los productos que comercializa también suben y debe aumentar los precios al consumidor final.

Para los productores agropecuarios la situación cambia, ellos consideran que una suba del dólar oficial los beneficia, ya que ellos venden en dólares, “un dólar oficial a $ 7,50 sería lo ideal; a nosotros, a diferencia de otras personas, nos conviene que el dólar suba, pero no el blue, sino el oficial”, expresaron a este medio.

El comportamiento de la divisa verde en la década “ganada”

BILLETES DE UNA ETAPA CASI ESTÁTICA AL CEPO CAMBIARIO.

En mayo de 2003 el dólar cotizaba a $2,92. Pasó una década K y la divisa norteamericana fue una ficha que repercutió en todo el tablero económico. De una primera etapa, planchada o casi estática, a una marcada curva ascendente, pese a que en el discursos se evita mencionar la palabra “devaluación” o se la niega. Pero la mayor suba de la divisa verde se produjo en la segunda etapa del kirchnerismo con Cristina Fernández al frente de la Casa Rosada.

En mayo de 2012, la moneda cotizaba a $4,49, mientras que la semana pasada promedió $5,25, un 16% más. El resultado de la primera gestión cristinista tuvo un dólar que pasó de $3,16 en mayo de 2008 a $4,12 en 2011, una variación del 30%. Entre 2003 y fines del 2007, con Néstor Kirchner como presidente, la divisa verde marcó un comportamiento moderado, tan solo se escapó un 6 por ciento.

Los efectos

Para algunas sectores, como los productivos, se vive un fuerte retraso cambiario. Los dólares que ingresan por el comercio exterior se liquidan por un peso que se “hace agua”, ante la aguda inflación que parece no tener desaceleración. Y los costos en insumos o materias primas se siguen elevando.

A un mes de haber resultado reelecta, Cristina había dispuesto un cerrojo a la divisa de Estados Unidos.

El cepo

Primero se implementó un formulario para evitar a los “coleros” y luego se limitó la autorización de cambio solo para los viajes al exterior. Desde ahí, el dólar paralelo tuvo una explosión, que llegó a su pico de $10, hace un mes. Ahora, bajó los decibeles y se ubicó en $8,75. El Gobierno dice que se trata de un mercado “ínfimo”.

El escenario

  • La mayoría cree que el dólar es un refugio ante la inflación. Para los productores, el retraso cambiario perjudica.
  • Desde noviembre de 2011, el Gobierno nacional implementó un cerrojo cambiario. Ahora solo autorizan para turismo.
  • El 42% de los encuestados sostuvo que el movimiento del dólar no tiene incidencia en sus cuentas diarias.

Salta: 44% menos de depósitos en dólares

Cuando arrancaron las restricciones cambiarias, y acceder al dólar se volvió casi una odisea para la mayoría de los argentinos, la fuga de los depósitos en esa divisa comenzaron a acelerarse. Desde el cuarto trimestre de 2010 hasta hoy, los depósitos en moneda extranjera disminuyeron un 41% en todo el país. Eso representó una baja de alrededor de $3.000 millones de dólares.

Según un informe del Instituto Argentino para el Desarrollo de las Economías Regionales (Iader), Salta se encuentra entre las provincias que más sufrieron la merma de depósitos en dólares, ya que cayeron un 44% . En términos absolutos, se trata de casi 47 millones de dólares que salieron de la provincia en dos años.

Lo mismo ocurrió tanto en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires como en Formosa, Neuquén y Santa Cruz.

Iader informó que entre 2011 y 2012, las tres provincias que concentraban casi el 90% de los depósitos en dólares, perdieron 5.994 millones de dólares.

Hoy, dada la alta tasa inflacionaria, los ahorristas argentinos prefieren la moneda extranjera porque huyen de la inflación y del contexto de inseguridad jurídica. Esto refleja la falta de confianza en la política económica y monetaria en el Gobierno nacional.

LA OPINIÓN: ¿Debe preocupar el precio del dólar?

Por EDUARDO ANTONELLI, ECONOMISTA

El Gobierno sostiene que el precio del dólar no es motivo de preocupación porque se trata de un mercado reducido, donde todo está bajo control, etc. Si la cuestión es cuántas personas intervienen en el mercado marginal, aunque sean pocas, eso solo no implica que este mercado “no sea importante”, porque habría que ver cuántos dólares se transan y probablemente las cifras no sean tan reducidas. Tal vez lo más práctico sea preguntarse si la disparada del dólar puede ser considerada peligrosa o no. Sin ninguna duda, sí. El peligro de la disparada del dólar es que, por la historia de la Argentina, eso es visto como un anticipo de una devaluación oficial del peso, lo que cuando ocurra deteriorará aún más el poder de compra del salario porque eso incrementa la inflación.

¿Seguirá subiendo el dólar?

Lo más probable es que sí, porque la suba es consecuencia de la equivocada política económica que impulsa la inflación, que a su vez se debe al desproporcionado gasto público que se financia, además, con “la maquinita”

¿Cambiarán las cosas?

Es improbable, y menos en un año electoral donde ya se han aumentado las asignaciones, porque el Gobierno no acepta el diagnóstico que unánimemente plantean los economistas, o sea, que la inflación es el principal problema, y que ésta no se debe a que los empresarios sean “malos” o los trabajadores sean “angurrientos” con los salarios que pretenden, porque eso equivale a sostener que, cuando no hubo inflación, los empresarios se volvieron buenos, y los trabajadores austeros.

El problema se debe a que el gobierno gasta más de lo que la producción soporta y periódicamente añade billetes que potencian la inflación ante lo cual la gente se refugia en el dólar.

¿Qué conviene hacer?

Por supuesto no es verosímil que vaya a cambiar de actitud porque el gobierno se lo pida, con o sin blanqueos, y es improbable que ante la falta de confianza, quienes han comprado dólares para protegerse de la inflación y la inseguridad jurídica los cambien por pesos o CEDIN, por muchas promesas que haga el gobierno de devolverle luego los dólares, ¿o acaso en esta “década ganada” no le devolvieron el 25% en lugar del 100% de los bonos defaulteados a los ahorristas, y encima a los que no aceptaron los tratan de “buitres” y antipatrias”?.

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