Al arribar a Payogasta es imposible no asombrarse ante el rojo intenso que impera en no pocas laderas de los cerros y en los campos, entre los meses de febrero y mayo. Es que una de las principales actividades del pueblo es la producción de pimiento para pimentón.
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Al arribar a Payogasta es imposible no asombrarse ante el rojo intenso que impera en no pocas laderas de los cerros y en los campos, entre los meses de febrero y mayo. Es que una de las principales actividades del pueblo es la producción de pimiento para pimentón.
No hay productor, por más pequeño que sea, que no le destine parcelas a este cultivo. Por ello, desde 2012 se trabaja para la incorporación de adelantos técnicos en una zona donde impera el secado directo al sol, en forma artesanal.
El proyecto, impulsado por la comuna de Payogasta, busca integrar en un solo circuito el secado del pimiento, su molienda y envasado en el lugar de origen.
“Esto les permitirá, especialmente a los pequeños productores, tener una mayor competitividad, sobre todo ahora que se está cultivando pimiento en algunas zonas donde no era común, como el Valle de Lerma”, señaló la intendenta de Payogasta, Gladys Salva.
La localidad cuenta ya con un secadero de pimiento ubicado en el paraje Palermo. Fue construido recientemente y se estima que entrará en funcionamiento a fin de año. Tiene oficinas, una sala de acopio y resta contar con un galpón de empaque que empezará a construirse próximamente.
“Allí el secado se hará en hornos, lo que conferirá mejor calidad y color al pimiento. Se evitará así la exposición al viento y la tierra, que impera en el sistema actual”, destacó Salva.
También se avanza en la gestión para la compra e instalación de un molino, cuya puesta en funcionamiento se prevé para 2014. “La compra del molino ya está encaminada. En Palermo hay otro que será reacondicionado”, dijo Salva.
Cabe señalar que, al ser de carácter municipal, los productores podrán hacer uso de todas las instalaciones y las actividades se dividirán en turnos para una mayor organización.
El eslabón de la cadena que falta es la instalación de una envasadora. El objetivo es comercializar pimentón en el pueblo. “Actualmente en Payogasta se comercializa sólo la materia prima a grandes acopiadoras. Con este proyecto, se ampliará el espectro de ventas con un producto de excelente calidad”, afirmó la intendenta.
Una actividad familiar
En Payogasta se cultivan alrededor de 300 hectáreas de pimiento, actividad a la cual se dedican unos 250 productores distribuidos en Payogasta y en los parajes Buena Vista y Palermo. Cada grupo familiar tiene, generalmente, entre 4 y 7 hectáreas, con una o dos para pimiento.
Los frutos se cosechan entre febrero y abril, y el 90% son secados al sol en terrenos de altura y ripiosos, ya que este tipo de suelo concentra el calor. El secado demora 30 días.
Otro de los cultivos más difundidos en la zona son el tomate y la cebolla. El secadero permitirá también elaborar tomate disecado y, con la planta envasadora, comercializarlo.
Los Valles, zona de excelencia
La producción nacional de pimiento para pimentón se concentra en Salta, Catamarca y Tucumán, en los Valles Calchaquíes. En Salta, más de mil familias se dedican a esta actividad en Cachi, Molinos, Cafayate, San Carlos y Angastaco.
En la provincia hay 7 molinos: 4 en San Carlos, 2 en Cachi y uno en Cafayate. Además, los Valles cuentan con tres secaderos distribuidos en Payogasta, Cachi y San Carlos.
Aumentar los controles
En la última campaña Salta produjo 800 mil kg de pimiento para pimentón, un 20% menos que el año anterior, que cerró con un millón de kg, según señaló Víctor Cardozo, presidente de la Mesa Pimentonera de Salta.
“Hoy se paga el kg $14 cuando se había acordado $18. Ello es una gran pérdida para los productores. Muchos aún no vendieron su cosecha, por lo que creemos que el año que viene mermará la producción”, afirmó Cardozo.
Agregó que en Argentina se consumen 5 toneladas de pimentón, pero la gran mayoría es adulterado con harina de trigo y colorantes para abaratar su precio.
Cardozo hizo hincapié en la necesidad de mayores controles del Senasa tanto a la molienda ilegal como a los productos en góndola. “A ello se agrega que se importa pimentón muy barato”, afirmó.
El 70% del pimiento seco se vende a acopiadores, el 20% a la industria alimentaria y el resto es procesado de manera artesanal, según datos del INTA.
El pimiento, originario de América, se cultiva en los cinco continentes. India y China concentran el 50% de la producción mundial.