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El encuentro estuvo liderado por el secretario general del sindicato salteño, Alfredo Carrizo, quien compartió el debate con Gonzalo Velarde y Julio Varela, de Jujuy, Julio Rodríguez, de Tucumán, y con Walter Lucas Brizuela, oriundo de Catamarca. Los dirigentes acordaron encarar esta lucha de manera regional.
Comparten que la idea de que es injusto que el valor del GNC sea más económico en la Capital Federal.
Además, en el distrito bonaerense las tarifas son más altas que en las provincias del norte, donde tanto la bajada de bandera diurna como la bajada de bandera nocturna son más baratas.
Los referentes del noroeste que estuvieron presentes también establecieron contactos con sindicatos taxistas de La Rioja, San Luis, Santiago del Estero, Chaco y Formosa.
Según dijeron, esas provincias también se plegarían a la movilización convocada para el próximo martes 10 de mayo.
Suba del gas
Ante el aumento del gas natural comprimido, que el 6 de abril pasado saltó de $6,65 a 9,65, el Sindicato Único de Taxistas convocó a una movilización a la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMT) para que se efectivicen los pedidos de readecuación tarifaria que habían realizado desde noviembre del año pasado.
Tras la protesta, la AMT le confirmó a El Tribuno que abriría el proceso de consulta pública por escrito para luego dar curso a la suba de la tarifa.
Hasta el momento, la AMT no cumplió lo que anticipaba la semana pasada, ya que no se ha hecho la publicación oficial del cuadro tarifario solicitado por los taxistas, que debe ponerse a disposición de los usuarios para que puedan hacer las descargas que consideren pertinentes. Una vez cumplido ese paso legal, recién puede avanzarse en la aplicación de la suba.
Los taxistas solicitan que la bajada de bandera diurna trepe a los 12 pesos y la nocturna, a $14,40. Actualmente están valuadas en $10 y $11, respectivamente. Asimismo, requieren que la ficha durante el día pase de $0,85 a $1,20 y durante la noche de $0,90 a $1,44. Las presentaciones para revisar las tarifas se realizaron antes de la suba del 50% en el GNC.
En la reunión de ayer se acordó solicitar a nivel regional que se otorgue un subsidio a los taxistas del norte, ya que el precio del GNC en la Capital Federal es 30% más barato. Además, argumentaron, otros servicios de transporte como los colectivos reciben subsidios por los gastos de combustibles.
Aumento demorado
La adecuación de los cuadros tarifarios de los taxis podría consumarse dentro de 9 días, según dijo Carrizo ayer. Comentó que gracias a la intermediación de José Ramírez, secretario de Servicios Públicos, la AMT retomaría los procesos que ha estado dilatando desde hace meses. "Queremos que se concrete este aumento que significa entre el 22 y el 25% y que lo venimos pidiendo desde hace meses", subrayó Carrizo.
La primera presentación sobre este nuevo cuadro tarifario la realizaron a fines de noviembre del año anterior. Ante la falta de respuestas, la devaluación y la inflación que se sintió en los aumentos de combustibles, volvieron a presentar el pedido en la primera semana de marzo. Ante la indiferencia de la AMT y con la suba del 50% del GNC, la semana pasada el Sindicato Único de Taxistas se movilizó hasta las oficinas del ente y reiteró el pedido.
El dirigente gremial dijo: "Si tendríamos que ser realistas, teniendo en cuenta la reciente suba del GNC, necesitaríamos un aumento de entre el 40 y el 50%, pero tenemos que pensar en los usuarios también". Realzó ese gesto por parte de los taxistas, que a pesar de reducir sus márgenes de ganancia no pedirán una nueva readecuación tarifaria que se corresponda con los actuales precios de uno de sus principales insumos.
Por otra parte, también reconoció que eso no es por puro altruismo sino que también tiene que ver con preservar la utilización del transporte de taxis. Prefieren afrontar el incremento de los gastos sosteniendo y aumentando la cantidad de viaje y no subiendo la tarifa a los niveles que subió el GNC.
Controles
Carrizo se diferenció de otros dirigentes gremiales del sector que en días pasados se manifestaron en contra de que Autoridad Metropolitana de Transporte siga siendo la entidad que regule el funcionamiento de los taxis y remises en la ciudad. "Estamos de acuerdo con que la AMT se haga cargo de eso, si lo manejaría la Municipalidad sería un desastre", indicó. En ese sentido, destacó que el ente ha venido haciendo esfuerzos por contener el otorgamiento de licencias para que se respete el criterio de una por cada 400 habitantes. Apuntó que en la ciudad de Salta hay 3.700 licencias para taxis y remises. Opinó que la Autoridad ha hecho un trabajo aceptable en este punto, pero consideró que es de vital importancia profundizar las acciones.
En lo que no se mostró tan conforme fue en el incremento de la ilegalidad de los remises. Según el testimonio del gremialista, "en el último año en la capital provincial se pasó de tener 18 agencias truchas a contar con 32 de negocios de remises clandestinos". Además, añadió que la cantidad de coches sin registro creció en un 40%, de poco más de 250 rodados a cerca de 400 que hay en la actualidad.
"Tienen que mejorar los controles porque a nosotros nos afecta mucho, es una forma de competencia ilegítima", señaló Carrizo. "Ahora hay 14 agencias de remises ilegales nuevas y más de 150 autos que trabajan sin licencia, eso tiene que terminar, no se puede seguir avanzando en regular el sector sin atender a estas cuestiones", remató.
Sobre el reclamo de otros sectores, como la Asociación de Taximetristas, en cuanto a tener un representante de los taxistas en el directorio de la AMT -tal como sucede con la Unión de Tranviarios Automotor-, Carrizo coincidió con tal propósito. No obstante, aclaró: "Tiene que ser alguien que realmente nos represente, que tenga arraigo en los compañeros y que provenga de un sector gremial que tenga capacidad de movilización".