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Tras la golpiza que recibió el sábado pasado un chofer de la línea 7D de Saeta en el puesto del barrio Solidaridad, el Ministerio de Seguridad dispuso colocar a policías en 35 puntos donde terminan los recorridos de los colectivos y reforzara los patrullajes preventivos en sectores de mayor conflictividad.
El ministro de Seguridad, Carlos Oliver, se reunió el lunes con autoridades del sindicato de choferes "Unión Tranviario Automotor (UTA), representantes de Saeta, la Jefatura Mayor Policial, miembros del Gabinete de Seguridad y Centro de Coordinación Operativa, para analizar aspectos relacionados con la seguridad en el transporte de pasajeros.
En la oportunidad el sindicato manifestó preocupación por el registro de choferes agredidos durante el servicio que brindan, y solicitaron mayor cobertura policial en los 35 puntos de línea de la ciudad.
"Hicimos hincapié en la necesidad de reforzar la seguridad. El ministro de Seguridad se comprometió en poner a partir de las 6 de la mañana y hasta las 2 de la madrugada un efectivo policial en cada uno de los controles", remarcó Jorge Flores, secretario de la UTA.
Flores remarcó que el compromiso consiste en reforzar los controles sorpresivos durante los recorridos, y que cuando las unidades de los turnos nocturnos lleguen al punto de línea, acompañar con un efectivo policial mientras se produce el descanso de los choferes. "En caso de no cumplirse con nuestro pedido, se analizarán medidas de fuerza", advirtió el sindicalista.
Por su parte, el Ministerio de Seguridad expuso sobre el servicio Saeta que funciona hace dos años, mostró estadísticas de intervenciones relacionadas con choferes, indicando que el mayor porcentaje se debió a hechos de conflictividad social o inconvenientes en el tránsito, que derivaron en agresiones contra los trabajadores.
En este sentido se solicitó que se refuercen las capacitaciones sobre el uso adecuado del "botón de pánico", con el que cuentan las más de 500 unidades de Saeta.
El pedido fue motivado ya que se registró un 80 por ciento de mal uso de la herramienta preventiva, fundamental para poder hacer una adecuada cobertura de seguridad para choferes y pasajeros.
"Cabe destacar que el 18 por ciento de activaciones de botón de pánico se realizaron por cuestiones de asistencia médica para pasajeros y desorden entre pasajeros, mientras que el 2 por ciento restante se activó por violencia contra choferes, en diferentes circunstancias", aseguraron desde la cartera de Seguridad.
Se acordó una próxima reunión con organismos municipales para articular medidas preventivas, como desmalezamiento en sectores de riesgo, y mejoras en el servicio de alumbrado público en distintos recorridos. El sábado, el chofer Esteban López sufrió una tremenda golpiza de parte de tres sujetos. En un determinado sector de la ciudad uno de los agresores a bordo de una moto 110 cc interpretó que el colectivero pasó a gran velocidad "levantando tierra". Luego de intercambiar algunas palabras, López siguió su curso normal tratando de cumplir con el horario exigido por la empresa. En el control de Solidaridad fue interceptado por tres hombres, quienes lo patotearon.