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Fue una situación realmente inédita, que desencadenó la furia de los futbolistas de la Selección argentina. Luego del ingreso de las autoridades sanitarias locales (Anvisa) al campo de juego para intentar llevarse a los jugadores Emiliano Martínez, Giovani Lo Celso, Cristian Romero y Emiliano Buendía, varios de los dirigidos por Lionel Scaloni reaccionaron. Uno de ellos fue Nicolás Otamendi, que empujó y le hizo frente a uno de los funcionarios, pero se calmó luego de la intervención del entrenador.
¿Quién fue el brasileño que entró a la cancha? Se trataría de un policía federal que formaba parte de la comitiva sanitaria, que fue hasta el hotel argentino -primero- y luego al estadio para ubicar a los cuatro futbolistas argentinos. Fuentes allegadas al seleccionado nacional indican que pudieron constatar que estaba armado y llevaba una pistola debajo de su remera azul.
Fue un hecho sin precedentes el que se vivió en San Pablo. En pleno encuentro, la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria fue directamente a buscar a los cuatro jugadores mencionados. Después de estos hechos, la delegación albiceleste abandonó el campo de juego y aguardó la decisión de la Conmebol de suspender el cotejo correspondiente a la fecha 6 de las Eliminatorias Sudamericanas.
La situación de Martínez, Lo Celso, Romero y Buendía estuvo en el foco de atención durante la previa del clásico. Se los acusaba de haber mentido al llegar el viernes a Brasil proveniente de Caracas. Brasil prohíbe el ingreso a quienes durante los 14 días anteriores estuvieron en Gran Bretaña, India o Sudáfrica. Así se ponía en duda sus presencias en el duelo.
Sin embargo, un acuerdo entre la FIFA, la Conmebol y el Gobierno brasileño parecía haber destrabado el asunto: todo el plantel argentino llegó sin problemas al estadio y hasta se pudo empezar a jugar el partido, hasta que estalló el escándalo.
En declaraciones a la transmisión del canal Globo, el presidente de la Anvisa, Antonio Barra Torres, explicó que la delegación argentina había sido notificada que los 4 jugadores deberían permanecer aislados en el hotel y aseguró que los agentes de la Policía Federal que fueron a constatar que ellos estuvieran allí, se encontraron con que habían salido para el estadio.
“Llegamos a este punto porque nada de lo que Anvisa ordenó fue cumplido. (Los jugadores) tuvieron orientación para permanecer aislados en el hotel para aguardar la deportación. Pero no cumplieron’', dijo Antonio Barra Torres, presidente de la Anvisa.
Fuente: TN