Expertos en tecnología de la Policía Federal iniciarán mañana el análisis del contenido de los teléfonos celulares secuestrados en el marco de la causa por el crimen del comerciante Gabriel Izzo, asesinado el 9 de junio en la localidad bonaerense de San Antonio de Padua, mientras los investigadores creen que en el caso, que ya tiene a tres detenidos y dos prófugos, hay un sexto involucrado pero ya fue identificado y analizan pedir su captura nacional e internacional.
inicia sesión o regístrate.
Expertos en tecnología de la Policía Federal iniciarán mañana el análisis del contenido de los teléfonos celulares secuestrados en el marco de la causa por el crimen del comerciante Gabriel Izzo, asesinado el 9 de junio en la localidad bonaerense de San Antonio de Padua, mientras los investigadores creen que en el caso, que ya tiene a tres detenidos y dos prófugos, hay un sexto involucrado pero ya fue identificado y analizan pedir su captura nacional e internacional.
Fuentes judiciales aseguraron que detectives del Departamento Técnico de Cibercrimen de la Policía Federal Argentina comenzarán a trabajar sobre los ocho teléfonos celulares secuestrados en los allanamientos dispuestos por los fiscales en la casa de los tres sospechosos detenidos en el marco del caso, como también en una pizzería y un quiosco de la localidad bonaerense de Castelar perteneciente a uno de los apresados.
Los investigadores pretenden analizar la información de los historiales de las redes sociales como WhatsApp, Facebook, Messenger, Twitter, Instagram, YouTube, Snapchat, Tik Tok de cada uno de los aparatos.
"Queremos saber qué antenas captaron la apertura de cada línea y así poder establecer los movimientos de cada uno de los detenidos", dijo una fuente judicial con acceso al expediente, que tiene detenidos a Walter Rodríguez Sierra (53), alias "El uruguayo", Gustavo Julio Alberto Mac Dougall (49) y el mecánico Gustavo Damián Potenza.
Por otro lado, los fiscales a cargo del caso, Marisa Monti y Claudio Oviedo, ya solicitaron la captura nacional e internacional de otros dos sospechosos identificados como Diego Eduardo Correa (25), alias "Tiki" -quien fue herido en una pierda con un balazo disparado por la víctima-, y Víctor Ricardo Martín Fernández Galarza (30). El ataque ocurrió el viernes 9 de junio a las 4.20 en una casa de la calle Italia 1077, a pocas cuadras del centro de San Antonio de Padua, donde vivía Izzo, dueño de un aserradero, junto a su esposa Silvina Petinari, hija del propietario de una empresa dedicada a la fabricación de acoplados, volcaduras y semirremolques en Merlo. Al menos dos delincuentes forzaron una persiana de madera tipo americana de la casa e ingresaron, tras lo cual sorprendieron al matrimonio.
Afuera, según la investigación, otros dos delincuentes los aguardaban dentro de un Volkswagen Gol Power gris como "campana".
Según las fuentes, Izzo se despertó al escuchar ruidos y agarró dos armas de su propiedad que guardaba en su habitación: una pistola Bersa calibre .40 y un revólver .38, y salió de la habitación para ver qué sucedía.
En esas circunstancias, se enfrentó con los delincuentes, quienes le dispararon con armas de fuego y además lo apuñalaron.
La víctima también disparó, aunque solo con el revólver dado que la pistola se le trabó y aparentemente no alcanzó a herir a nadie, añadieron los voceros.
Izzo fue alcanzado por al menos cinco proyectiles y murió en el lugar a raíz de las lesiones de bala y también de arma blanca que los delincuentes le provocaron, mientras que su esposa fue apuñalada y golpeada.