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La pesadilla no se detiene en Alto Comedero, Jujuy. Más restos óseos fueron hallados en el marco de la investigación contra Matías Jurado, el hombre de 37 años acusado de haber asesinado a Jorge Omar Anachuri (68) y sospechado de estar vinculado con la desaparición de otras cuatro personas, todas en situación de calle.
El macabro hallazgo se produjo durante una segunda inspección en la vivienda del acusado, donde ya se habían encontrado piel humana, prendas de vestir y restos calcinados. El fiscal regional Guillermo Beller, que lleva adelante la causa, confirmó que estos nuevos elementos fueron localizados en una serie de excavaciones y rastrillajes en el terreno.
“Se realizarán análisis de ADN para determinar si los restos corresponden a las víctimas”, detalló el fiscal, quien también anticipó que las tareas continuarán en los próximos días con excavaciones más profundas. Jurado permanece detenido con prisión preventiva por 120 días, imputado formalmente por el delito de “homicidio agravado por ensañamiento”.
Un perfil escalofriante
La investigación contra Jurado escaló en gravedad cuando un adolescente de 16 años, su sobrino, declaró en Cámara Gesell que el acusado “descuartizaba a personas que llevaba a su casa y luego se deshacía de los restos arrojándolos a un descampado o enterrándolos”.
Según ese testimonio, cada viernes por la noche el hombre recibía a distintos invitados con quienes tomaba alcohol. Después de un rato, le pedía al joven que se retirara “porque pasaban cosas malas”.
La vivienda, que hoy es conocida por los vecinos como “la casa del horror”, se encontraba en condiciones deplorables: paredes ennegrecidas, piso de tierra, objetos quemados y restos de materiales biológicos.
Quiénes son las presuntas víctimas
Además de Anachuri, los otros desaparecidos son:
- Juan Carlos González (60)
- Juan José Ponce (51)
- Miguel Ángel Quispe (60)
- Sergio Alejandro Sosa (25)
Todos ellos vivían en situación de calle, con problemas de adicciones, y frecuentaban la zona donde residía Jurado. El fiscal Beller aseguró que una cámara de seguridad registró a dos de las víctimas subiendo a un taxi junto a Jurado y que un celular fue geolocalizado dentro de la vivienda del acusado, al momento de la desaparición de otra persona.
Jurado, en pleno uso de razón
En un primer momento, la defensa intentó alegar inimputabilidad. Sin embargo, el fiscal fue categórico: “Estaba en sus cabales al momento de los crímenes”, afirmó Beller. Esto implica que será juzgado penalmente y no como una persona inimputable.
El expediente continúa ampliándose con peritajes forenses, análisis de ADN y nuevas medidas judiciales. Mientras tanto, el temor entre los vecinos crece y la justicia avanza en el caso más estremecedor que haya sacudido a Jujuy en los últimos años.