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La diputada Griselda Galleguillos rompió el silencio tras el escándalo vivido el martes en la Cámara de Diputados de Salta, donde fue protagonista de un tenso cruce con su par Socorro Villamayor. En diálogo con Radio Salta, Galleguillos afirmó: "Tenía la sensación de que me iban a empujar por las escaleras", en referencia a lo ocurrido durante la sesión.
El episodio se desató mientras se discutía la falta de tratamiento del proyecto de Ficha Limpia en la Cámara de Diputados de la Nación. Sin embargo, el debate derivó en ataques personales y amenazas explícitas. En este contexto, Villamayor lanzó una intimidante frase hacia Galleguillos: "Vas a tener que recoger los dientes del piso", tras una referencia de la legisladora a su padre.
Galleguillos aseguró que no dejará pasar el incidente y llevará el caso hasta las últimas consecuencias para exigir una sanción contra Villamayor. "Es inaceptable que se den este tipo de situaciones en un ámbito donde debería primar el respeto y el debate constructivo", subrayó.
En sus declaraciones, Galleguillos cuestionó la doble moral del cuerpo legislativo: "Hace un par de sesiones se homenajearon a las mujeres en la lucha contra la violencia de género, pero en la práctica es totalmente distinto. En este caso, se está validando la violencia por parte de una mujer hacia otra mujer. Si dejamos pasar esto, se va a naturalizar, y nosotros, como representantes, tenemos que dar un mensaje claro: la violencia no tiene género".
La diputada detalló los agravios sufridos, que quedaron registrados tanto en la versión taquigráfica como en la transmisión oficial de la sesión: "Se me dijo que soy una loca, una ignorante, y que voy a tener que recoger mis dientes del piso. Si un hombre hubiese dicho eso, ya estaría preso, pero como es una mujer, nadie llamó al orden ni pidió una sanción".
Galleguillos adelantó que está trabajando junto a su asesor legal, para avanzar con las denuncias correspondientes: "Voy a tomar acciones legales en la justicia, la Secretaría de la Mujer y la Comisión de la Mujer de la Cámara de Diputados. También voy a pedir un juicio político, porque esto no puede volver a suceder. La violencia, venga de quien venga, debe ser sancionada".
Asimismo, la legisladora manifestó sentirse desprotegida: "El día del incidente, sentí miedo de que me empujaran por las escaleras. Es una situación muy desagradable trabajar en un ámbito donde no te sentís segura y donde nadie toma cartas en el asunto para imponer respeto".
A pesar de lo vivido, Galleguillos aseguró que no permitirá que este episodio la detenga: "Voy a seguir trabajando con compromiso por la gente. No me van a amedrentar. Aunque mi familia y mi entorno están preocupados, yo estoy decidida a luchar contra la corrupción y a exigir que se respeten las normas de convivencia y el reglamento interno de la Cámara".
Con este incidente, la diputada llamó la atención sobre la necesidad de coherencia entre el discurso y las acciones: "No podemos seguir naturalizando este tipo de agresiones. Aquellos que son hijos del poder siempre están protegidos, mientras quienes intentamos desenmascarar la verdad somos atacados. Pero no me voy a callar".