El productor, director y guionista Gastón Portal sorprendió al revelar un capítulo desconocido de su vida, dedicando su primera novela, Cyrana, a sus dos madres: Matilde, su madre biológica, y Lucía (Labora), la madre que lo crió. En una entrevista, Portal compartió detalles íntimos sobre su infancia marcada por la convivencia con sus dos madres y la revelación de su verdadera identidad a los 14 años.
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El productor, director y guionista Gastón Portal sorprendió al revelar un capítulo desconocido de su vida, dedicando su primera novela, Cyrana, a sus dos madres: Matilde, su madre biológica, y Lucía (Labora), la madre que lo crió. En una entrevista, Portal compartió detalles íntimos sobre su infancia marcada por la convivencia con sus dos madres y la revelación de su verdadera identidad a los 14 años.
Cyrana, la primera novela de Portal, publicada por Planeta, surge en medio de la pandemia, inspirada por su hija Gala y su deseo de explorar una historia más amplia que un simple cuento. La novela, influenciada por Cyrano de Bergerac de Edmond Rostand, explora temas como el grooming, las fobias sociales y el vínculo entre madre e hija. Portal se sumerge en la complejidad de este vínculo, reconociendo su propia experiencia y buscando sensatez en su enfoque narrativo.
Según le contó a Tatiana Schapiro en Infobae, la vida de Gastón Portal estuvo marcada por la dualidad: hijo de dos padres creativos y divergentes, vivió una infancia peculiar con su abuela materna en Belgrano R., antes de ser criado por Lucía (Lulú), a quien consideraba más que una madre. La relación con su madre biológica, Matilde, comenzó a los 14 años, sin resentimientos ni reproches, dando lugar a una conexión profunda entre hermanos y una familia extendida única.
Este relato íntimo de Gastón Portal revela la complejidad de las relaciones familiares y la importancia de la identidad en la construcción del individuo. Cyrana, dedicada a sus dos madres, es más que una novela; es un homenaje a la vida y a las experiencias que moldean nuestra existencia.