El abrasador calor que golpeó a la provincia de Salta en la mañana del domingo no fue impedimento para que cientos de fieles se volcaran a las calles para honrar a la Virgen de Atocha, patrona del pueblo que fuera tierra de Solís Pizarro.
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El abrasador calor que golpeó a la provincia de Salta en la mañana del domingo no fue impedimento para que cientos de fieles se volcaran a las calles para honrar a la Virgen de Atocha, patrona del pueblo que fuera tierra de Solís Pizarro.
La procesión, que fue encabezada por el arzobispo de Salta, Mario Cargnello, y por el intendente del municipio de San Lorenzo, Federico Parra, se inició a las 10.30 y la imagen de la Virgen con el Niño Jesús en los brazos, tallada en un trozo de concha marina, recorrió las calles del pueblo llevada por los fieles.
Luego, el obispo Cargnello celebró la misa junto al párroco Horacio Urbano, en el predio de la capilla de Atocha a la que asistieron más de 600 personas de la zona.
“En toda la geografía americana la Virgen, en sus distintas advocaciones, es patrona de todos los pueblos”, aseguró Cargnello e invitó a “no poner el esfuerzo en comprar cosas en esta Navidad, sino en reencontrarnos con Dios y fundamentalmente unirnos en familia”.