En agosto se cumplirá un año de la muerte de Candela Sol Rodríguez. Por el crimen de la nena de 11 años, que fue secuestrada de la esquina de su casa en la localidad bonaerense de Hurlingham, se detuvo a 8 personas. Ayer todas quedaron en libertad y la causa fue declarada nula.
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En agosto se cumplirá un año de la muerte de Candela Sol Rodríguez. Por el crimen de la nena de 11 años, que fue secuestrada de la esquina de su casa en la localidad bonaerense de Hurlingham, se detuvo a 8 personas. Ayer todas quedaron en libertad y la causa fue declarada nula.
La decisión fue tomada por la Cámara Penal de Morón. También se resolvió separar al juez Alfredo Humberto Meade de la instrucción de la causa por el asesinato de la pequeña, además de determinar la nulidad de las declaraciones indagatorias. La medida, contenida en una extensa resolución de 58 páginas que prácticamente lleva a “foja cero” el caso, fue tomada por la Sala III de la Cámara, que además sugiere que se investigue la actuación del fiscal Marcelo Tavolaro.
Al determinarse la nulidad de las indagatorias, la investigación del caso de la nena -encontrada asfixiada en una bolsa de nylon el 31 de agosto pasado, ocho días después de haber sido secuestrada en la localidad bonaerense de Villa Tesei- sufre un escandaloso retroceso.
Los camaristas, según un segmento de la resolución que trascendió ayer, encontraron “fallas técnicas” en la instrucción del caso.
El juez Meade reconoció que ya fue notificado de su separación del caso y que el próximo paso será elegir un nuevo magistrado.
Por el secuestro y asesinato de la niña de 11 años permanecían detenidos Héctor Bermúdez, quien era sindicado como presunto autor material del crimen; Leonardo Jara, acusado de ser quien se acercó a la menor para engañarla, y Alberto Espíndola, uno de los que habría aportado, de acuerdo con la instrucción que acaba de anularse, la logística para cometer el hecho.
El 15 de marzo pasado, el juez Meade había determinado la excarcelación de Héctor “Topo” Moreyra.
Antes habían sido excarcelados Gladys Cabrera, dueña de la casa en la que la pequeña habría estado secuestrada; Hugo Altamirano, presunto cuidador durante el secuestro, además de Guillermo López y Fabián Gómez.
El reclamo de Carola Labrador
Luego de enterarse del fallo de la Cámara de Morón, que anuló lo actuado en la causa que investigó el secuestro y crimen de Candela Rodríguez, Carola Labrador, madre de la menor asesinada, se mostró disconforme.
“Si me tengo que encadenar al Ministerio de Seguridad lo voy a hacer”, dijo la mujer.
“Nadie me llamó, nadie me explicó nada. Siempre me entero de todo por los medios”, dijo Labrador.
“Si me tengo que encadenar al Ministerio de Seguridad lo voy a hacer, porque a nadie más que a mí le interesa la muerte de mi hija, una nena inocente de 11 años”, dijo Labrador.
La madre de la víctima señaló que “acá pasó lo mismo que pasó con Poncio Pilatos, todos se lavan las manos y nadie se acuerda que mataron a una nena inocente”.
“Los asesinos de mi hija están libres y van a seguir en la calle matando gente”, comentó por último Labrador.
A partir del fallo de la Sala Tres de la Cámara de Morón todo el andamiaje judicial en torno del crimen de Candela se ha derrumbado y los abogados no adelantaron por dónde prevén que podría rearmarse la investigación.