La directiva del club Banfield salió hoy repudiar a un grupo de violentos a los que acusó de “tomar‘ la sede del club durante tres horas”, “agredir a miembros de la comisión y a una periodista y exigir la renuncia de los dirigentes”.
El club, en un parte oficial, calificó que lo ocurrido “constituye el primer intento golpe de estado de la historia de la institución”. El agredido fue el vicepresidente primero Marcos Acuña.
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La directiva del club Banfield salió hoy repudiar a un grupo de violentos a los que acusó de “tomar‘ la sede del club durante tres horas”, “agredir a miembros de la comisión y a una periodista y exigir la renuncia de los dirigentes”.
El club, en un parte oficial, calificó que lo ocurrido “constituye el primer intento golpe de estado de la historia de la institución”. El agredido fue el vicepresidente primero Marcos Acuña.
“El Club Atlético Banfield repudia los hechos de violencia ocurridos en la institución en la noche del miércoles. Un grupo de socios que se acercó en forma espontánea a la sede se vio infiltrado por violentos que tomaron el edificio durante tres horas, agredieron a miembros de la comisión directiva, empleados del club y hasta a una periodista, y exigieron la renuncia de todos los dirigentes”, sostuvo el comunicado.
Este hecho se parece a lo ocurrido días atrás en San Lorenzo, cuando integrantes de la barra irrumpieron en una reunión de CD y, más cerca en el tiempo, cuando barras de Independiente se encerraron con el presidente del club, Javier Cantero, en su despacho.
Según el club, el presidente Carlos Portell iba a recibir a un grupo de socios disconformes con la actualidad deportiva cuando se infiltraron los violentos.
A través de la oficina de prensa el club anunció que presentará una denuncia judicial por agresión y privación ilegal de la libertad.