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Hace un año seguían a los traficantes infiltrados

Viernes, 22 de junio de 2012 20:54

El juez federal de Orán, Raúl Reynoso, aseguró ayer que la detención del chofer de una ambulancia del hospital de Salvador Mazza, una enfermera del mismo establecimiento y un supuesto paciente, en proximidades de Tartagal cuando transportaban 25 kilos de cocaína, fue el resultado de una investigación que demandó un año y desvinculó del caso al resto del personal y autoridades del Ministerio de Salud Pública de la Provincia.

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El juez federal de Orán, Raúl Reynoso, aseguró ayer que la detención del chofer de una ambulancia del hospital de Salvador Mazza, una enfermera del mismo establecimiento y un supuesto paciente, en proximidades de Tartagal cuando transportaban 25 kilos de cocaína, fue el resultado de una investigación que demandó un año y desvinculó del caso al resto del personal y autoridades del Ministerio de Salud Pública de la Provincia.

El magistrado precisó que el paciente que trasladaba el vehículo “era real” y que luego del operativo “fue dejado en su lugar de destino”, tras el arresto de la enfermera Berta Ibáñez y de Bruno Chávez, el chofer.

El nombre del tercer detenido se mantiene en reserva, aunque el juez reveló que se trata de “una persona joven, de la zona, que tendría relación de parentesco con el chofer de la ambulancia”, pero no viajaba en el rodado, de modo que de esta manera descartó que el tercer cómplice fuera el hombre que era trasladado desde la frontera al hospital Juan Domingo Perón, de Tartagal.

Reynoso precisó que el vehículo sanitario fue detenido en el marco de “una investigación que data del año pasado y que llevaba adelante el Escuadrón 54 de Gendarmería”.

“No fue un hecho al azar, sino con investigación previa, y como había indicios serios de que en ese viaje estaban trasladando droga, se procedió a la requisa de la ambulancia”, puntualizó Reynoso.

“El vehículo había partido del hospital de Salvador Mazza, en la frontera con Bolivia, e iba a gran velocidad, con las balizas y la sirena encendidas, cuando fue detenido”, en el acceso norte de Tartagal, graficó el juez.

“Los gendarmes descubrieron de inmediato dos bolsos ubicados sin ningún disimulo, junto a la camilla del paciente”, apuntó.

Cuando se le preguntó si podría haber más personas del hospital de Salvador Mazza involucradas en el caso, además del chofer de la ambulancia y la enfermera, Reynoso lo negó.

“Hasta ahora lo que tenemos es responsabilidades individuales, que no comprometen de ninguna manera al Ministerio de Salud de la Provincia de Salta”, manifestó.

Por otra parte, aseguró que rápidamente había dado la orden de “revisar con perros antinarcóticos la ambulancia en su totalidad y devolver el vehículo al hospital para no perjudicar al resto de los enfermos, ya que es el único vehículo de emergencias del centro de salud de Salvador Mazza”.

Por otra parte, el juez admitió que las mismas personas podrían haber transportado sustancias ilícitas en otras ocasiones, “pero -explicó- sucede que en todo trámite de investigación, la fuerza de prevención realiza la requisa cuando hay un alto indicio de encontrar la droga”.

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