Con una visión muy particular de la realidad internacional y la relación de Argentina con el mundo, Jorge Castro, el autor del libro “La visión estratégica de Juan Domingo Perón”, en diálogo con El Tribuno, efectuó un análisis pormenorizado de la situación comercial del país y su relación con Venezuela, Brasil y los países asiáticos.
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Con una visión muy particular de la realidad internacional y la relación de Argentina con el mundo, Jorge Castro, el autor del libro “La visión estratégica de Juan Domingo Perón”, en diálogo con El Tribuno, efectuó un análisis pormenorizado de la situación comercial del país y su relación con Venezuela, Brasil y los países asiáticos.
En este sentido, para Castro, el país se encuentra en una etapa fundamental de su producción y comercialización de granos.
¿Los gobiernos posteriores a Perón no tuvieron estrategias para afrontar las crisis económicas?Yo no diría eso, pero el problema es la situación de Argentina en el contexto mundial, porque la visión estratégica del general Juan Domingo Perón en la Argentina es inseparable del contexto internacional.
En este sentido lo que interesa, ante todo, para ubicar la situación argentina actual, es tener en cuenta y con precisión cuáles son los datos mundiales con respecto a la situación de la Argentina actual. En este sentido, la relación principal que tiene el país es por un lado con Brasil y por otro con China.
¿Con cuál de los dos es más fuerte?En realidad son de distinta naturaleza. En América del Sur, el vínculo estratégico principal es el que tiene Brasil con la Argentina y la Argentina con Brasil. Es recíproco.
Es el nudo por el cual se organiza América del Sur y, a su vez, la característica que tiene América del Sur es que se ha convertido en una subregión que exporta principalmente materia prima y la dirige ante todo a China, que es el principal socio de toda América del Sur y, en primer lugar, de Brasil.
¿Qué papel juega en este caso Venezuela?El vínculo internacional de Venezuela se da por un lado con los Estados Unidos y por otro lado con Colombia. No hay vínculo comercial, ni tampoco en materia de inversiones entre Venezuela y el Mercosur.
¿Es conveniente la entrada de Venezuela al grupo?
Es una decisión exclusivamente política. No tiene ningún significado desde el punto de vista de la integración comercial ni desde el punto de vista económico.
¿Y la relación comercial con Irán?
La relación con Irán es muy reducida y se refiere a la exportación de granos, especialmente de trigo y de maíz, pero no tiene una importancia estratégica alguna.
Si en la Argentina no produjéramos soja, maíz o trigo, ¿cuál sería la salida de la Argentina?
Hay que tomar en cuenta que la demanda mundial de alimentos se duplicará en los próximos veinte años y la Argentina es uno de los tres principales países exportadores de granos del mundo. En este sentido hay que tomar en cuenta que en los últimos diez años la Argentina ha logrado resolver la crisis de su sector externo y en ese sentido ha logrado una inserción internacional definida, por ejemplo con China y los países asiáticos, y el resultado es que tiene ahora un superávit comercial de carácter estructural y permanente.
¿Cómo ve el futuro económico del país?
Los datos fundamentales a tomar en cuenta con respecto a la situación argentina actual y con respecto a su inserción en el mundo, por un lado el precio de la soja, que está en 640 dólares la tonelada, el más alto de la historia, y por el otro la tasa de interés en los Estados Unidos y en la Unión Europea, que se ubican entre el 0 y el 1% anual. Esto significa que el contexto internacional que tiene la Argentina es el más favorable que ha tenido desde fines del siglo XIX.
Entonces, ¿hasta qué punto le puede afectar al país la crisis europea?
Muy poco, solo el efecto de la agudización de la crisis europea se nota a través de la mayor percepción de riesgo del sistema financiero internacional. El resultado es que cuando la crisis europea se agudiza, por ejemplo en lo que sucede en el movimiento actual, la consecuencia de esto es que salen los capitales líquidos de los países emergentes, entre ellos los de América del Sur, y se orientan a buscar valores refugios y garantías de seguridad ante una situación de crisis.
Y los valores refugios en el sistema financiero internacional son muy escasos. Son, ante todo, los títulos internacionales a diez años. Primero están los títulos del Tesoro norteamericano y luego son los bonos alemanes a diez años y no hay más.
¿Cómo cree que termina la crisis económica europea?
No sabría decir cómo termina, por que en realidad el futuro se me escapa, pero lo único que le puedo señalar es que la que mantiene en pie a la zona del euro, la que mantiene al euro y la que mantiene en pie a Europa es Alemania.
Alemania ha dado una vuelta en los últimos diez años, ha logrado reformas significativas en su aparato industrial y en su sistema laboral y se ha convertido en uno de los países más productivos y competitivos del mundo.
Es por eso que la mayor parte de las exportaciones alemanas se orienta fuera de Europa, sobre todo en los países emergentes como China, India y Brasil. En este sentido hay que tener en cuenta que toda Europa, y en especial la zona del euro, está realizando un proceso de recuperación del nivel de productividad perdido.
La competitividad hoy en Europa se juzga y se establece acorde con los niveles de competitividad y de la competencia mundial, que establecen los países asiáticos por un lado y los Estados Unidos por otro.
¿De qué trata su libro sobre Perón?
El libro es una manera de analizar la visión estratégica del general Perón. Para el expresidente de los argentinos su visión estratégica tiene tres componentes fundamentales y lo principal es la idea de que la historia es una serie de sucesivas integraciones convergentes en la que el proceso histórico evoluciona con un carácter determinista guiado por la técnica. Es la técnica lo que le otorga un carácter determinista al proceso histórico.
¿Hoy, hay algún dirigente que pueda tener la técnica que tuvo Perón?
Puede que lo haya. El fenómeno central en el sistema mundial es el proceso de revolución tecnológica que se manifiesta en internet. Este es el dato central del sistema mundial.
Lo más importante de tener en cuenta son los cambios que hizo Perón, en su acción de gobierno, guiado por su pensamiento estratégico.
Es el Perón cinco años después del “Braden o Perón”, pero que decide establecer como prioridad una relación estratégica con los Estados Unidos. Es el mismo Perón en los dos casos. Perón tenía muy en claro sus programas y, sobre todo, tenía en claro su visión de largo plazo, que provenía fundamentalmente de su condición militar.
¿Qué es lo trascendental de esta estrategia?
Uno de los objetivos trascendentales es que a partir de la crisis de 1948-1949, en la que termina la primera etapa del proceso de industrialización, que encabezó su gobierno desde el 46 al 48, comienza una etapa distinta. El objetivo fundamental ya no es controlar el sector agrario sino estimularlo para aumentar las exportaciones y esto apuntó a un esfuerzo de búsqueda del capital extranjero y de un acuerdo estratégico con los Estados Unidos.
El perfil del analista
Jorge Castro es abogado. Fue columnista internacional del diario Perfil, presidente del Instituto de Planeamiento Estratégico, secretario de Planeamiento Estratégico de la Presidencia de la Nación, profesor de la Universidad de Buenos Aires y director del diario El Cronista Comercial, entre otros.
También recibió la insignia de la “Orden Nacional de Cruzeiro do Sul” otorgada por Brasil, fue miembro del Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales (CARI) y miembro y presidente de Foro Sur, grupo dedicado a promover el Mercosur.
Posee publicaciones de investigaciones como “Globalización y justicia social”, “El acceso de la Argentina a la sociedad del conocimiento” , “La gran década. Del abismo al crecimiento”, “Perón y la globalización”,
“La tercera revolución” y “Revolución política en la Argentina globalizada”.
En su último libro, “La visión estratégica de J. D. Perón”, Castro destaca que el pensamiento de Perón es la elaboración lúcida de una época histórica, de sus pensadores y de los pensadores que en ella influyeron. Es el fruto de la experiencia vivencial y apasionada de un joven oficial y, luego, de un político comprometido con cada momento de su tiempo histórico. Importa analizar la época y las ideas que motivaron y dieron vida a ese pensamiento y recorren su desarrollo. Lo hace como teoría y práctica de la construcción deliberada de poder político.