El legendario músico argentino Willy Crook será el protagonista de una nuevo encuentro de “Cultura da la nota”, este miércoles, a las 21, en el Teatro Provincial de Salta (Zuviría 70). Como el objetivo de este ciclo es reunir en un mismo escenario a artistas de reconocimiento nacional con músicos salteños, la banda Lobo de Bar será la telonera del show. Las entradas generales, a $15, están a la venta en la boletería del teatro.
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El legendario músico argentino Willy Crook será el protagonista de una nuevo encuentro de “Cultura da la nota”, este miércoles, a las 21, en el Teatro Provincial de Salta (Zuviría 70). Como el objetivo de este ciclo es reunir en un mismo escenario a artistas de reconocimiento nacional con músicos salteños, la banda Lobo de Bar será la telonera del show. Las entradas generales, a $15, están a la venta en la boletería del teatro.
Con la música en las venas
Eduardo Pantano, conocido como Willy Crook, cuenta con una larga trayectoria en la música nacional. Su saxo quedó registrado en varias canciones de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota y participó de otros proyectos como Los Abuelos de la Nada y Lions in Love, entre otros.
Además colaboró con artistas como Charly García, Los Fabulosos Cadillacs, Riff, Man Ray, Memphis, Fontova Trío, Los Encargados y Sumo, entre otros.
Crook vivió a pleno los dorados 80. En esos años, el rock nacional llegó a su apogeo y en la década siguiente probó suerte por Europa. Se sumó al grupo de Daniel Melingo, Lions in Love. En su regreso al país, formó los Funky Torinos y se metió con todo en el funk y soul. El grupo fue telonero de varias bandas internacionales como James Brown.
Sobre Lobo de Bar
Hace un par años, dentro de la Escuela Superior de Música de Salta se gestó un grupo con un interés común: el culto a la música popular. El proyecto se fue afianzando con los años y pasaron de ser una orquesta netamente jazzera a convertirse en una banda funky.
Lobo de Bar tiene un repertorio nuevo, abandona un poco los viejos estándares de jazz para hacer melodías más simples versionando canciones conocidas y digitando instrumentos con el alma por sobre el cuerpo (boddy and soul). Sin ser improvisados, tratan siempre de improvisar, intentando tocar con el corazón más que con las partituras. La génesis de su evolución se ve marcada con la gestación de un grupo dentro de la Orquesta de Jazz Fusión del profesor Walter Guzmán, que luego empezó a organizarse de manera independiente y a rodar por distintos bares de nuestro medio.