El misionero Sergio Romero se convertirá en el segundo arquero argentino con más presencias en partidos mundialistas al alcanzar los diez encuentros y superar por uno a Nery Pumpido, campeón mundial en México 86.
Al menos en este Mundial, aún llegando a la final, no le alcanzará al hombre del Mónaco para igualar a Ubaldo Fillol, quien suma trece cotejos en tres Copas del Mundo. Desde el partido ante Nigeria en Porto Alegre, Chiquito es el segundo arquero con más presencias en el seleccionado, y desde hoy sumará 52 partidos, cuatro menos que el Pato.
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El misionero Sergio Romero se convertirá en el segundo arquero argentino con más presencias en partidos mundialistas al alcanzar los diez encuentros y superar por uno a Nery Pumpido, campeón mundial en México 86.
Al menos en este Mundial, aún llegando a la final, no le alcanzará al hombre del Mónaco para igualar a Ubaldo Fillol, quien suma trece cotejos en tres Copas del Mundo. Desde el partido ante Nigeria en Porto Alegre, Chiquito es el segundo arquero con más presencias en el seleccionado, y desde hoy sumará 52 partidos, cuatro menos que el Pato.
Romero, con escasos partidos en la Primera de Racing, se convirtió en titular en los Juegos Olímpicos de Beijing al reemplazar al lesionado Oscar Ustari, y Diego Maradona lo llevó al certamen de Sudáfrica como titular, donde participó de los cinco compromisos, y a los que ahora sumó los cuatro de esta copa.
El arquero argentino mantuvo la titularidad que había logrado en el 2010 de la mano de Maradona. A pesar de haber recibido críticas por mantener como titular a un jugador que no tenía rodaje en su equipo, Sabella siempre decidió darle a Romero la responsabilidad de llevar la camiseta número 1 en la espalda.
Chiquito llegó a Brasil 2014 sin tener continuidad en el Mónaco, equipo donde es suplente. Aún así, mantuvo su lugar entre los once titulares de la Selección. Pachorra, en un hecho poco habitual en él, confirmó que Romero sería el arquero de su equipo antes de dar la lista definitiva de los 23 jugadores que viajarían al Mundial.
En los cuatro primeros encuentros que disputó, el arquero de la Selección tuvo una buena actuación. El mal desempeño de la defensa en algunos pasajes de los partidos lo han dejado expuesto pero, en muchas oportunidades, sus apariciones fueron claves para tapar los errores.
Romero es un arquero joven y ya lleva encima la experiencia de dos Mundiales. A los 27 años es el arquero de la Selección que sueña con obtener la tan preciada Copa del Mundo. Hoy lo superará a Pumpido e intentará colaborar para poder obtener el mismo titulo que Nery logró en el 86’.