Salteñas perseverantes
Tanto Jimena como Victoria fueron alumnas del taller Física al Alcance de Todos, que conduce el profesor Daniel Córdoba y que se desarrolla en la UNSa desde hace más de 15 años.
"La verdad es que para llegar al Balseiro realmente hay que hacer un gran esfuerzo. Desde febrero estamos estudiando de lunes a sábado, un promedio de 12 horas por día y podemos decir que esa es la etapa más dura, porque en realidad comenzamos meses antes", dijo Jimena, ansiosa y feliz por este nuevo desafío que le toca vivir, porque además, ellas decidieron con esfuerzo diseñar su propio destino y no esperar que las cosas lleguen mágicamente.
Exigencias
Uno de los requisitos para ingresar al Balseiro es haber cursado y aprobado dos años en una carrera universitaria. Así, las dos jovencitas están promediando el tercer año de sus carreras en la UNSa. En el caso de Jimena, Ingeniería Civil y Victoria, licenciatura en Física.
Jimena cursará en el Balseiro Ingeniería Mecánica. Su interés apunta a la robótica aplicada sobre todo en el ámbito de la salud, por ejemplo el tema de prótesis. Victoria, en tanto, comenzará Física Médica: "A mi me interesa el área de tratamiento oncológico y diagnóstico por imágenes. Además, comienza a desarrollarse fuertemente el tema de la Medicina Nuclear por eso creo que es muy importante. Me apasiona".
Ocho chicas de 48 ingresantes
En la larga historia que tiene la carrera de Ingeniería Mecánica en el Balseiro, Jimena es la quinta mujer que ingresa. Este año el instituto rionegrino dedicó 10 becas para Ingeniería Mecánica y 3 para Física Médica. Que hayan ingresado dos salteñas es todo un dato para las mujeres, si tenemos en cuenta que se postularon estudiantes de diferentes países latinoamericanos, ingresando 48 en total. De ese total, solo 8 son mujeres. "Para nosotras es todo un logro que haya 8 chicas, no creemos que sea un número bajo porque hubo años en que no ingresó ninguna", le contó Victoria a El Tribuno.
El ingreso
Para poder estudiar en el Instituto Balseiro hay que tener una base universitaria de dos años con un buen rendimiento académico, luego rendir un examen escrito, que en este caso fue el 29 de mayo en Tucumán, una entrevista personal que se realizó en Buenos Aires el 11 de junio y luego los estudios de salud de rigor.
"Lo más difícil de todo este período tal vez fue el tener que estar mucho tiempo aislado, porque estás estudiando tiempo completo", dijo Victoria. "Es levantarse a las 7 de la mañana, venir a entrenamiento y regresar a casa fundida a las 22, acostarte y comenzar nuevamente el ciclo", dijo Jimena, quien contó que está de novia con un estudiante de ingeniería. "Yo estoy abocada de lleno al estudio" contó Victoria, quien vive con su mamá y aprovechó para agradecerle el apoyo incondicional que tuvo para con ella. Lo mismo hizo Jimena, quien contó que sus padres la acompañaron y estuvieron todo el tiempo a su lado.
"La verdad es que nos sentimos orgullosas porque logramos esto con mucho esfuerzo", dijo Victoria. "También queremos agradecerle a Daniel Córdoba porque estuvo todo el tiempo con nosotros. El nunca nos hace fácil las cosas, dijeron entre risas, todo lo contrario, nos exige cada día más y eso nos ayuda a ser autónomas a la hora de resolver problemas.
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Salteñas perseverantes
Tanto Jimena como Victoria fueron alumnas del taller Física al Alcance de Todos, que conduce el profesor Daniel Córdoba y que se desarrolla en la UNSa desde hace más de 15 años.
"La verdad es que para llegar al Balseiro realmente hay que hacer un gran esfuerzo. Desde febrero estamos estudiando de lunes a sábado, un promedio de 12 horas por día y podemos decir que esa es la etapa más dura, porque en realidad comenzamos meses antes", dijo Jimena, ansiosa y feliz por este nuevo desafío que le toca vivir, porque además, ellas decidieron con esfuerzo diseñar su propio destino y no esperar que las cosas lleguen mágicamente.
Exigencias
Uno de los requisitos para ingresar al Balseiro es haber cursado y aprobado dos años en una carrera universitaria. Así, las dos jovencitas están promediando el tercer año de sus carreras en la UNSa. En el caso de Jimena, Ingeniería Civil y Victoria, licenciatura en Física.
Jimena cursará en el Balseiro Ingeniería Mecánica. Su interés apunta a la robótica aplicada sobre todo en el ámbito de la salud, por ejemplo el tema de prótesis. Victoria, en tanto, comenzará Física Médica: "A mi me interesa el área de tratamiento oncológico y diagnóstico por imágenes. Además, comienza a desarrollarse fuertemente el tema de la Medicina Nuclear por eso creo que es muy importante. Me apasiona".
Ocho chicas de 48 ingresantes
En la larga historia que tiene la carrera de Ingeniería Mecánica en el Balseiro, Jimena es la quinta mujer que ingresa. Este año el instituto rionegrino dedicó 10 becas para Ingeniería Mecánica y 3 para Física Médica. Que hayan ingresado dos salteñas es todo un dato para las mujeres, si tenemos en cuenta que se postularon estudiantes de diferentes países latinoamericanos, ingresando 48 en total. De ese total, solo 8 son mujeres. "Para nosotras es todo un logro que haya 8 chicas, no creemos que sea un número bajo porque hubo años en que no ingresó ninguna", le contó Victoria a El Tribuno.
El ingreso
Para poder estudiar en el Instituto Balseiro hay que tener una base universitaria de dos años con un buen rendimiento académico, luego rendir un examen escrito, que en este caso fue el 29 de mayo en Tucumán, una entrevista personal que se realizó en Buenos Aires el 11 de junio y luego los estudios de salud de rigor.
"Lo más difícil de todo este período tal vez fue el tener que estar mucho tiempo aislado, porque estás estudiando tiempo completo", dijo Victoria. "Es levantarse a las 7 de la mañana, venir a entrenamiento y regresar a casa fundida a las 22, acostarte y comenzar nuevamente el ciclo", dijo Jimena, quien contó que está de novia con un estudiante de ingeniería. "Yo estoy abocada de lleno al estudio" contó Victoria, quien vive con su mamá y aprovechó para agradecerle el apoyo incondicional que tuvo para con ella. Lo mismo hizo Jimena, quien contó que sus padres la acompañaron y estuvieron todo el tiempo a su lado.
"La verdad es que nos sentimos orgullosas porque logramos esto con mucho esfuerzo", dijo Victoria. "También queremos agradecerle a Daniel Córdoba porque estuvo todo el tiempo con nosotros. El nunca nos hace fácil las cosas, dijeron entre risas, todo lo contrario, nos exige cada día más y eso nos ayuda a ser autónomas a la hora de resolver problemas.