"Luego de que denunciamos el abandono y muerte de mi hija en el hogar Sala Cuna nos prometieron justicia. Pero hace ya más de 10 días esperamos una determinación del fiscal penal de la causa, que nunca llega. Así como están las cosas la muerte de mi hija tiene la marca de la impunidad", afirmó Susana Camacho Villagómez, desde su humilde hogar.
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"Luego de que denunciamos el abandono y muerte de mi hija en el hogar Sala Cuna nos prometieron justicia. Pero hace ya más de 10 días esperamos una determinación del fiscal penal de la causa, que nunca llega. Así como están las cosas la muerte de mi hija tiene la marca de la impunidad", afirmó Susana Camacho Villagómez, desde su humilde hogar.
Junto a su suegra, Sandra Rearte, hicieron ayer público un pedido de celeridad en la causa penal abierta tras la muerte de Janet Villagómez, mientras se hallaba en guarda y tutela del Estado Provincial.
Según las mujeres, el fiscal penal 3 de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas, Rodrigo González Miralpeix, tomó intervención inmediatamente en el hecho y les prometió una investigación seria y acorde a los posibles delitos planteados.
La madre de Janet (la víctima de un supuesto abandono de persona) había responsabilizado públicamente a las autoridades de la Casa Cuna por el fallecimiento de su hija Janet de solo 5 años, ya que aseguró, junto a otros familiares, que cuando la nena fue alojada en la institución se encontraba en buen estado de salud.
Los funcionarios del Ministerio de Primera Infancia afirmaron que la niña recibió todas las atenciones mientras estuvo en el hogar Cuna.
Sin embargo, se conoció públicamente que la niña cuando fue derivada de la Sala Cuna al Hospital Público Materno Infantil estaba ya en estado grave, casi desesperante, tal es así que a los pocos días de haber ingresado falleció por una infección generalizada.
El caso
Janet Villagómez siempre estuvo al cuidado de sus familiares casi por el tiempo que duró su corta existencia. Vivía junto a su madre y cuatro hermanos más en un inquilinato de villa Ceferino.
La madre de la niña, que sufría una severa discapacidad, fue operada y la pequeña quedó a cargo de su abuela paterna.
Desde el Sala Cuna se asevera que fue la abuela la que planteó que no podía cuidar a la niña, ya que no se sentía capacitada para llevar adelante el complejo tratamiento ni brindar los cuidados especiales que necesitaba.
"Ante esta situación -dijo un funcionario de Primera Infancia-, se determinó de manera inmediata implementar la medida de protección para la Casa Cuna, ya que cuenta con un equipo de profesionales, pediatras, fonoaudiólogas, nutricionistas, enfermeros, y una especialista en estimulación temprana, para asistirla durante todo el día".
"La niña ingresó a principios de septiembre y su situación era extremadamente compleja, por lo que se hizo una evaluación con todo el equipo de la Casa Cuna, es decir que intervinieron un médico, un fisioterapeuta, una fonoaudióloga, estimuladores tempranos, trabajadores sociales y una psicóloga", dijeron. Lamentablemente, muchos días después de su ingreso Janet enfermó.
Ante la gravedad del cuadro se la derivó al Hospital Materno Infantil el lunes 16 y falleció el domingo 22 de octubre.
Hoy la mamá de Janet aseguró que hubo negligencia en el cuidado de su hija, ya que la niña había sobrevivido junto a ella, con toda la pobreza que arrastra, por más de cinco años. Al respecto, dijo con vehemencia y llanto: "Cuando se la llevaron de casa estaba en perfecto estado de salud, un mes después, cuando ingresó al Materno Infantil su cuadro era desesperante, eso tiene una explicación y responsables".