Le atribuyen cada vez más sanaciones a la Virgen que llora de Metán. Una joven de Salta capital, que sufre esclerosis múltiple, dijo que pudo volver a caminar gracias a un milagro concedido por ella.
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Le atribuyen cada vez más sanaciones a la Virgen que llora de Metán. Una joven de Salta capital, que sufre esclerosis múltiple, dijo que pudo volver a caminar gracias a un milagro concedido por ella.
Mientras continúan los conmovedores testimonios de sanaciones y milagros, vecinos de San José de Metán piden que la Iglesia tome muestras y realice un análisis de las lágrimas, que parecen sangre, que derrama una pequeña imagen de la Virgen Rosa Mística.
La semana pasada, Mónica Guerrero, una joven de 25 años que reside en el barrio Hernando de Lerma, de Salta capital, llegó a San José de Metán para visitar a la Virgen y pedirle por su salud, ya que padece esclerosis múltiple. Es una enfermedad del sistema nervioso central que afecta al cerebro, tronco del encéfalo y a la médula espinal. La mielina, sustancia que recubre las fibras nerviosas, resulta dañada y entonces la habilidad de los nervios para conducir las órdenes del cerebro se ve interrumpida.
La chica ingresó prácticamente en andas, sostenida de los brazos por sus padres, ya que desde hacía un mes no podía caminar sin ayuda.
"Me enteré lo de la Virgen que llora por Facebook y decidimos con mi familia venir a Metán. Me tuvieron que ayudar para entrar porque no podía caminar sin ayuda desde hacía un mes. Cuando la vi comencé a llorar desconsolada, me impactó mucho. Pero yo vine con mucha fe, recé mucho y le pedí a la virgencita por mi salud y me concedió un milagro", dijo Mónica Guerrero a El Tribuno.
La joven había dejado una foto suya al lado de la imagen que se encuentra en el living de la casa de la familia Frías Mendoza, en el barrio Marco Avellaneda.
"Yo también recé por esta chica y le pedí mucho a la Virgen por ella. Ya hay muchos testimonios de milagros, sería bueno que la Iglesia haga analizar las lágrimas que derrama para que la comunidad de Metán tenga una respuesta sobre esta bendición que derrama sobre este pueblo Rosa Mística", dijo Rosana Mendoza, cuya familia es propietaria de la imagen milagrosa.
Guerrero volvió ayer a Metán para dar gracias a la Virgen por el milagro concedido. Entró caminando por sus propios medios y se puso a rezar. "La semana pasada, cuando nos fuimos, ya comencé a sentirme mejor. Paramos en una estación de servicio y pude manejar el auto. Cuando llegamos a mi casa y me acosté a dormir sentí como una caricia en los dedos de los pies. Al otro día me levanté y podía caminar. Esto es un gran milagro que me concedió esta Virgen que llora", dijo Mónica, muy emocionada.
Visita de sacerdotes
El pasado 7 de abril los sacerdotes de Metán Osvaldo Climent y Gustavo Paredes visitaron la casa de la familia Frías Mendoza para observar la imagen de la Virgen que llora. Al salir dijeron a los fieles que hay que ser prudentes y que la Arquidiócesis de Salta ya está al tanto de lo que está ocurriendo en la localidad con la Virgen Rosa Mística.