Un amanecer salvaje soportaron los habitantes de finca “La Huella” de Vaqueros, donde una jauría de perros vagabundos exterminó dos rebaños de ovejas y cabras a los que atacaron cuando estos se encontraban reunidos y amontonados en sus respectivos chiqueros.
El ataque de los perros cimarrones no tiene precedentes en la localidad de Vaqueros, donde hubo en otros tiempos animales cebados, pero nunca con la ferocidad y la eficacia mortal exhibidas en esta oportunidad
Ayer en un relato exclusivo para El Tribuno uno de los propietarios del emprendimiento familiar ubicado sobre el camino viejo al cementerio de Vaqueros relató prácticamente una película de terror matinal, donde una jauría de perros en medio de los rebaños de ganado menor prácticamente exterminaron a las ovejas, mientras que a las cabras lecheras le asestaron un feroz golpe.
Da Souza explicó que a las que no habían sido degolladas las mató el terror y el aplastamiento, ya que al no poder huir se amontonaron contra las paredes del corral y fueron aplastadas por el peso de cientos de los asustados animales.
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Un amanecer salvaje soportaron los habitantes de finca “La Huella” de Vaqueros, donde una jauría de perros vagabundos exterminó dos rebaños de ovejas y cabras a los que atacaron cuando estos se encontraban reunidos y amontonados en sus respectivos chiqueros.
El ataque de los perros cimarrones no tiene precedentes en la localidad de Vaqueros, donde hubo en otros tiempos animales cebados, pero nunca con la ferocidad y la eficacia mortal exhibidas en esta oportunidad
Ayer en un relato exclusivo para El Tribuno uno de los propietarios del emprendimiento familiar ubicado sobre el camino viejo al cementerio de Vaqueros relató prácticamente una película de terror matinal, donde una jauría de perros en medio de los rebaños de ganado menor prácticamente exterminaron a las ovejas, mientras que a las cabras lecheras le asestaron un feroz golpe.
Da Souza explicó que a las que no habían sido degolladas las mató el terror y el aplastamiento, ya que al no poder huir se amontonaron contra las paredes del corral y fueron aplastadas por el peso de cientos de los asustados animales.
Al ser requerido acerca de si realmente fueron perros los que exterminaron a las ovejas y cabras Da Souza aseguró que sí, que los vieron cuando degollaban a las ovejas, rebaño con el que se ensañaron.
El pequeño productor dijo que llegó a estar frente a uno de los perros y que éste por poco lo muerde al igual que al cuidador del lugar.
“Nada pudimos hacer. A pesar de que teníamos un perro cabrero, el mismo no reaccionó ante la matanza de sus pares y el rebaño enmudeció de terror. Apenas clareó nos dimos cuenta de la masacre de nuestro emprendimiento y comenzamos a solicitar ayuda para sacrificar a los animales moribundos aún”.
“Quedamos shockeados y en pocos minutos la noticia corrió por todo el pueblo. En un rato muchas personas se acercaron para ayudar y otras para que le donáramos la carne fresca de los animales que estábamos sacrificando, porque estaban muy heridos. En medio de esta desgracia cientos de kilos de carne fueron aprovechados por los vecinos, instituciones y gente común, muy necesitada que además nos dio una mano. De más está decir que hemos denunciado los hechos y el perjuicio causado en nuestra economía familiar y una vez más queda claro que aquellos que crían perros y no los cuidan como es debido terminan siendo los causantes de estos incidentes que provocan pérdidas cuantiosas”, dijo amargamente Da Souza.
El comunicado matinal
“Lamentamos profundamente subir estas fotos, y pedimos disculpas si herimos la sensibilidad de alguien. Esta madrugada tres perros (uno policía, otro bayo de pelo corto, de porte mediano/grande, y un tercero sin identificar) atacaron nuestros animales, fuente del sustento diario de nuestra familia, que se encontraban en su corral.
Más de 70 cabras lecheras y ovejas, muchas de ellas preñadas, muertas y muchas heridas que no sabemos si se recuperarán. Como ha pasado en muchas ocasiones en nuestro querido pueblo, estas son las consecuencias de no ser responsable en la tenencia de los perros. Esperamos que los dueños se hagan cargo de estas desastrosas consecuencias y reflexionemos sobre la tenencia responsable de mascotas.
Agradecemos a la Municipalidad por la máquina que vino a excavar un pozo para enterrar los animales”, concluye el comunicado.
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Animales de raza
Da Souza explicó que la totalidad de los rebaños estaban compuesto por animales de raza lechera, tanto los caprinos como los ovinos, y que justamente esa actividad era la que sustentaba a la familia.
“Nosotros fabricamos quesos y yogures naturales, completamente artesanales y que hasta ayer estaban en las góndolas de muchos comercios de la zona. Es un emprendimiento familiar de subsistencia con muchos años de trabajo”.
“Hoy a la mañana los perros ajenos nos causaron un daño prácticamente irreparable en el tiempo. Tenemos además de más de setenta ejemplares muertos, decenas de cabras y ovejas heridas por las fauces de los perros que no sabemos si la podremos recuperar para la producción”.
“Lo peor es que hay perros que ya están cebados. Hoy atacaron nuestro rebaño, mañana no sé”, dijo.