Cuando no es la cotización del dólar son los conflictos políticos en Bolivia, pero lo cierto es que el alza en los precios de la ancestral hoja de coca supera con creces a la inflación.
La especulación en Salta está a la orden del día. Lejos quedaron los tiempos en que el coqueo era una tradición arraigada entre los hombres de campo y en las clases populares. Hoy se ha vuelto casi privativa de las billeteras más abultadas.
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Cuando no es la cotización del dólar son los conflictos políticos en Bolivia, pero lo cierto es que el alza en los precios de la ancestral hoja de coca supera con creces a la inflación.
La especulación en Salta está a la orden del día. Lejos quedaron los tiempos en que el coqueo era una tradición arraigada entre los hombres de campo y en las clases populares. Hoy se ha vuelto casi privativa de las billeteras más abultadas.
Algunos kioscos mantienen el precio para conservar los clientes
Poco antes de las elecciones primarias en Bolivia, un cuarto de coca común costaba alrededor de 540 pesos, luego subió a 600 y hoy cotiza a 650, en la zona del mercado Cofruthos.
La seleccionada pasó en menos de un mes de 690 pesos a 750 y ahora a 800, contó Moisés, un salteño que cada mañana da vida al ritual de armar el “acullico”, aunque ahora piensa seriamente en dejar de hacerlo.
"Sería el colmo que me quiten ese gusto, prefiero estar muerto", manifestó un coquero, mientras pedía una bolsita de "sele" en uno de los kioscos.