Luego de jornadas lluviosas y de haber bajado la temperatura, las montañas que rodean a la ciudad de Salta, por el lado oeste, se vistieron con un manto blanco.
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Luego de jornadas lluviosas y de haber bajado la temperatura, las montañas que rodean a la ciudad de Salta, por el lado oeste, se vistieron con un manto blanco.
“Paisajes mágicos. Qué belleza. Nuestra hermosa provincia sorprende todos los días”, se podía leer en las redes sociales.
El meteorólogo Ignacio Nieva había señalado hace unos meses atrás que “no nos debe llamar la atención que se de este fenómeno natural. Esto se da porque los cerros están a una altura aproximada de los 5000 metros, y en ese nivel la temperatura aproximada es de 0 grados”. Y agregó en ese momento: “Es una belleza natural que debemos saber apreciar”.
La combinación perfecta: los últimos rayos de sol del atardecer, los cerros salteños cubiertos de nieve y encima es viernes, para muchos el comienzo dos días descanso.