En el mes de la Pachamama, miembros de la Fundación Alfarcito, creada por el difunto aunque siempre presente Padre Chifri, visitaron la Finca El Toro para compartir los rituales dedicados a la madre tierra con la comunidad educativa y los vecinos del lugar.
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En el mes de la Pachamama, miembros de la Fundación Alfarcito, creada por el difunto aunque siempre presente Padre Chifri, visitaron la Finca El Toro para compartir los rituales dedicados a la madre tierra con la comunidad educativa y los vecinos del lugar.
Se trata de una localidad situada a 110 kilómetros de la ciudad de Salta, a unos 3.700 metros de altura rodeada por cerros, lagunas y el imponente Nevado de Chañi.
"Pudimos concretar la visita a la Escuela Nº 4619 Coronel Severo de Zequeira gracias a la invitación de su director, Osvaldo Barrientos, con quien coordinamos la fecha y pudimos compartir la ceremonia de la Pachamama con la comunidad de Finca El Toro", contó Carlos Figueroa, vocero de la Fundación. Agregó: "Al llegar, todo estaba listo para iniciar el acto, con una excelente preparación, tal como lo mostraba la presentación de la escuela".
La ceremonia dio inicio con el ingreso de las banderas de ceremonia, continuando con las estrofas del Himno Nacional Argentino y seguido por la marcha a las Malvinas. La señora Gabriela Colque pronunció unas palabras explicando en forma detallada el significado del culto a la Madre Tierra.
Ofrendas a la Pachamama de un día soleado de este agosto
Luego se llevó a cabo una maratón de lectura de poesías y coplas relacionadas con la Pachamama.
Finalmente, el director presidió la ceremonia ancestral en honor a la Madre Tierra, explicando el significado de cada momento y con una gran participación de los niños y las familias.
"Compartimos el almuerzo que fue preparado por la señora Cornelia Olmos, cocinera de la escuela y los padres de los alumnos. Al terminar les repartimos bolsas con chocolates y golosinas. Nos juntamos junto al mástil para disfrutar del hermoso sol de los cerros y entregar las donaciones que nos hicieron llegar amigos de la fundación, también las tejedoras de la obra del Padre Pío y las mantas tejidas por las amigas del Hospital Italiano que se agrupan en AMPHI Responsabilidad Social", contó Carlos Figueroa.
Expresó: "Regresamos felices y agradecidos por el cariño recibido, por la hospitalidad de la comunidad y especialmente del director de la escuela Osvaldo Barrientos y su señora esposa Gabriela Colque. El agradecimiento a don Santos Sulca, presidente de la comunidad indígena de Puesto Grande El Toro.
Finalmente dijo: "Se puede observar en cada lugar que visitamos el espíritu de Chifri, su obra que continúa y se transmite a los más pequeños".