Están acostumbrados a lidiar con la fama, pero desde expusieron su apoyo al kirchnerismo debieron soportar un sinnúmero de críticas que nada tienen que ver con su trabajo. Pese a todo, Pablo Echarri y Nancy Dupláa conformaron una pareja que no está dispuesta a callarse. Mucho menos, cuando reciben insultos por parte de desconocidos en la calle, tras una noche de romance.
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Están acostumbrados a lidiar con la fama, pero desde expusieron su apoyo al kirchnerismo debieron soportar un sinnúmero de críticas que nada tienen que ver con su trabajo. Pese a todo, Pablo Echarri y Nancy Dupláa conformaron una pareja que no está dispuesta a callarse. Mucho menos, cuando reciben insultos por parte de desconocidos en la calle, tras una noche de romance.
Divertido, el actor develó en PH, Podemos Hablar, que se emite por Telefe, una fuerte pelea que Nancy protagonizó con una mujer que la insultó al salir del Alvear Palace Hotel después de una apasionada noche en pareja. “Cuando uno defiende una idea se caldean los ánimos. Y en estos últimos días fuimos al Alvear porque tenemos un amigo que tiene un departamento ahí y nos presta el bulo. Voy ahí a pasar momentos con Nancy, una escapada. Lo explico porque sino los compañeros no me van a entender”, explicó Pablo.
Con ánimos de aclarar los tantos, Echarri siguió contando el episodio y dio detalles: “Fuimos a tomar unos tragos al bar de arriba y cuando bajamos para irnos nos cruzamos con gente. Y a alguien se le ocurrió decir: Miren a estos kirchneristas en el Alvear. Y bueno ... Ya habíamos tomado una botella de vino, un whisky, mi esposa es Nancy! Cosas que terminan en una situación...”. Y se sinceró: “Yo ya sabía cómo iba a terminar, que por suerte fue bastante risueña. Fue exasperante. Mi esposa le dijo que se acostumbre de acá en adelante...”.
Entre risas, Pablo reveló el desenlace de la incómoda situación ... confesando que Nancy casi se va a las manos con la mujer que los criticó. “Terminó con Nancy haciendo fuck you, la señora haciendo fuck you, Nancy agarrándole el dedo. Uno de los señores presentes diciéndole que perdone a la mujer ... Y mientras una amiga de la señora nos pedía una foto, la señora le gritaba que suba”. De armas tomar.