La fiscal de Graves Atentados Contra las Personas, Ana Inés Salinas Odorisio, es la funcionaria a cargo de la investigación sobre el suicidio del exjuez federal José Antonio Solá Torino, quién decidió quitarse la vida anoche antes de ser detenido, en un domicilio que habitaba.
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La fiscal de Graves Atentados Contra las Personas, Ana Inés Salinas Odorisio, es la funcionaria a cargo de la investigación sobre el suicidio del exjuez federal José Antonio Solá Torino, quién decidió quitarse la vida anoche antes de ser detenido, en un domicilio que habitaba.
Según pudo averiguar El Tribuno, el exmagistrado dejó una carta que todavía no se hizo público su contenido. A las 10.30 de la mañana comenzó la autopsia en la morgue del Cuerpo de Investigaciones Fiscales.
Fuentes judiciales confirmaron a este medio que a la madrugada se hizo inspección ocular del lugar donde ocurrió el incidente, además se secuestró el arma y otras diligencias de rigor. Desde el Ministerio Público Fiscal expresaron que todos los “indicios apuntan a un suicidio”.
Después de que la PSA diera conocimiento de la muerte del exjuez, las pericias estuvieron a cargo la doctora Ana Salinas Odorissio y el doctor Omar Davila, jefe de los Investigadores del CIF. El cuerpo se retiró y fue conducido a la morgue del CIF.
La causa
Solá Torino iba a ser alojado en el Servicio Penitenciario Federal Complejo III NOA, en Güemes.
Horas antes, el fiscal de Transición de la Unidad Fiscal Salta, Carlos Amad, había solicitado la detención del exjuez tras una resolución emitida por la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
La acusación central giró en torno a las pruebas obtenidas, que daban cuenta de la intervención del excamarista en maniobras que permitieron a Miguel Farfán, un hombre condenado en 1999 por el transporte de 400 kilos de cocaína, fugarse a partir de un escrito por el cual pagó 15 mil pesos al exjuez.