Las organizaciones de DDHH de la Provincia realizaron un acto simbólico en el marco del Día Internacional por los Derechos Humanos. Las actividades se realizaron en las veredas del Juzgado Federal de Salta, entre Caseros y Deán Funes. Aprovecharon la ocasión para presentar la querella de "Encuentro, Memoria, Verdad y Justicia", de la ciudad de Orán, en la causa Graciela Beatriz Juárez en los Tribunales Federales.
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Las organizaciones de DDHH de la Provincia realizaron un acto simbólico en el marco del Día Internacional por los Derechos Humanos. Las actividades se realizaron en las veredas del Juzgado Federal de Salta, entre Caseros y Deán Funes. Aprovecharon la ocasión para presentar la querella de "Encuentro, Memoria, Verdad y Justicia", de la ciudad de Orán, en la causa Graciela Beatriz Juárez en los Tribunales Federales.
La jornada fue convocada por la Asociación Lucrecia Barquet y tiene como objetivo visibilizar la continuidad de los juicios por crímenes de lesa humanidad cometidos antes y durante la última dictadura cívico militar.
Desde la organización HIJOS Salta dejaron claveles rojos y acompañaron a Victoria, la mamá de la joven que fue desaparecida el 12 de agosto de 1976, por orden y ejecución supuestamente del militar Luis Dubois, para quien los querellantes piden la indagatoria y la prisión preventiva.
Con 84 años a cuesta, con un andador y un rosario, Victoria aún espera a su hija de 19 años que, ese 12 de agosto, de hace 44 años, se fue camino a la escuela, con un embarazo de dos meses, con los sueños por delante y con un compromiso con la alfabetización. "La llevaron por enseñar a leer y a escribir a los pobres de San Lorenzo y Tres Cerritos", dijo Victoria sentada en una silla soportando el calor del mediodía.
Victoria aún la espera y tiene un llanto que supera al recuerdo. "Mi hija me decía que cuando ella muriera que yo le lleve flores rojas a su tumba. Yo le preguntaba cómo pensaba ella que iba a morir antes que yo. Y ahora veo las flores rojas y me muero de pena porque no sé nada de ella ni a dónde puedo llevarlas sus flores que tanto ella quería. Yo les pido a los militares que me digan algo, que me digan qué hicieron con mi hija", dijo con todo su dolor Victoria.
Los tormentos no sólo fueron de la joven alfabetizadora. El 13 de agosto, al día siguiente de su desaparición, los militares fueron a la casa de Victoria, en barrio El Tribuno y entraron por la fuerza. "Eran las 14.10", dijo. El horror marca a fuego los sucesos. "Estaban todos uniformados, entraron directo a la habitación de mi hija y revolvieron todo. El que comandaba sacó la foto de mi hija y les dijo a todos que era una traidora a la Patria ¿cómo podía decir eso ese hombre? ¿con qué criterio juzgaba? ¿era traidora por juntar ropa para los pobres? También me encerraron a mi por 72 horas y no contentos con eso pasé un año completo yendo todos los días a reportame en los cuarteles", contó Victoria.
La humillación fue tanta que al segundo año de la desaparición forzada de Graciela ya le pedía que vaya a los cuarteles día por medio. El argumento del Ejército era que Victoria "se podía escapar de Salta".
"Luego de 44 años conservo la esperanza de saber qué hicieron con mi hija. Que alguien del Ejército Argentino se apiade y me diga qué hicieron con mi hija", dijo llorando.
"Desde la querella que presentamos entendemos que Dubois fue el encargado del operativo que se llevó a Graciela. Curiosamente el exmilitar nunca fue procesado porque la Cámara de Apelaciones siempre descartó los pedidos. Muchos de militares tienen aún tienen una cobertura por lo que contra Dubois tenemos que presentar más pruebas. En Salta los procesados y enjuiciados son siempre los mismos y ahora queremos ir contra los que participaron en el terrorismo de Estado, pero que no fueron ni citados a indagatoria. En el caso de Dubois tuvo participación demostrada en las causas Palomitas, Brizzi y Ragone y nunca fue citado ", dijo la abogada María José Castillos, quien junto a sus colegas David Leiva y Martín Plaza presentaron la querella en Tribunales.