En una manifestación sin sentido alguno, unos pocos dirigentes originarios de Misión Chaqueña, jurisdicción de Embarcación y a unos 25 kilómetros al este de esta ciudad, produjeron un corte de la ruta provincial 53 en reclamos de sueldos políticos para cuatro punteros del intendente anterior, Alfredo Llaya. La protesta está emparentada con los cambios de manos que sufrieron varias comunas, además de con los tiempos que corren, que por la crisis económica obligan a las nuevas administraciones a achicar gastos.
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En una manifestación sin sentido alguno, unos pocos dirigentes originarios de Misión Chaqueña, jurisdicción de Embarcación y a unos 25 kilómetros al este de esta ciudad, produjeron un corte de la ruta provincial 53 en reclamos de sueldos políticos para cuatro punteros del intendente anterior, Alfredo Llaya. La protesta está emparentada con los cambios de manos que sufrieron varias comunas, además de con los tiempos que corren, que por la crisis económica obligan a las nuevas administraciones a achicar gastos.
Lo cierto es que no más de una docena de indígenas wichis cortaron la ruta provincial 53 para exigirle al intendente actual, Carlos Funes, cuatro sueldos políticos, tal como estaban acostumbrados a cobrar, al parecer, durante los 20 años de la administración de Fredy Llaya.
Una radio FM de la zona recordó que el grupo de manifestantes eran los mismos que cortaron la misma vía de comunicación provincial cuando el actual presidente del Concejo Deliberante, Mauricio Makar, hace una semana, iba a reunirse con la comunidad para solucionarles temas de primera necesidad.
Esta protesta de ayer, que fue levantada pasado el mediodía, se suma a las de las semanas anteriores en Coronel Cornejo, en Cuña Muerta y Yacuy, jurisdicción de Tartagal y en los alrededores de Aguaray y Salvador Mazza. Todas por el mismos motivo: hay dirigentes sociales que dejaron de percibir subsidios y arengan a sus pares para armar protestas disfrazadas de pedidos de puestos de trabajo, o de obras, para llegar al mismo resultado.
Murió un bebé
El bebé de una mujer wichi de 35 años, que vive en Padre Lozano, falleció el fin de semana. Aunque en algunos medios circuló la versión de que la ambulancia que partió desde el hospital de Embarcación tardó tres horas en ir a buscarla, el gerente de ese nosocomio, Miguel Starykiesviez, lo negó.
El médico contó que la mujer estaba embarazada de 35 semanas. Ante el llamado se envió la ambulancia desde Embarcación hasta Padre Lozano.
El gerente detalló que a la mujer le dio una hemorragia genital y que por su estado luego fue trasladada al hospital de Orán, donde se le hizo una cesárea pero el bebé falleció. Desde Salud dicen que el caso no se enmarca en la emergencia sociosanitaria.