Este domingo, la cultura y el arte argentino afrontan una dura despedida: murió Carlos Regazzoni, uno de los artistas plásticos más importantes del país, reconocido también en el mundo. Tenía 76 años. La noticia de su muerte la dio su hijo, quien fuera titular del PAMI durante la gestión de Mauricio Macri.
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Este domingo, la cultura y el arte argentino afrontan una dura despedida: murió Carlos Regazzoni, uno de los artistas plásticos más importantes del país, reconocido también en el mundo. Tenía 76 años. La noticia de su muerte la dio su hijo, quien fuera titular del PAMI durante la gestión de Mauricio Macri.
"Se nos fue un grande. Abrazo pa!", escribió Carlos J. Regazzoni desde su cuenta de Twitter. Regazzoni, nacido en Comodoro Rivadavia, llevaba un tiempo en grave estado.
Escultor, pintor y padre de 7 hijos, Regazzoni vivió en Longchamps en Almirante Brown, provincia de Buenos Aires, antes de instalarse en 1999 en un galpón ferroviario de Retiro, en la Ciudad de Buenos Aires. Allí montó su taller, El Gato Viejo, que también fue una galería de arte para artistas noveles.
Su particular estilo, reutilizando piezas de chatarra, muchas veces con orígenes ferroviarios, para transformarlas en esculturas, lo llevó a triunfar en Francia. Allí se hizo conocido gracias a al filme El Hábitat del Gato Viejo, del cineasta galo Franck Joseph.
Ese estilo llamó la atención de la SNCF, compañía ferroviaria francesa, llegando a exponer sus obras en París, Francia. En ese país recibió el Gran Premio del 28º Festival de Pintura de Cannes-sur-Mer.
En el 2015, en tanto, fue declarado Ciudadano Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires. Además, sus cuadros se exhiben en prestigiosos museos, tanto en Buenos Aires (por ejemplo, el MALBA) como en París, mientras que algunas de sus obras fueron adquiridas por celebridades de Hollywood, Madonna, jeques árabes y Diego Maradona.
Durante las distintas etapas de su carrera, completó creaciones inspiradas en insectos -casi siempre hormigas-, que se vieron en las calles de Buenos Aires. Además, fue convocado para hacer una escultura en recuerdo de los indígenas de Bariloche y homenajeó a los primeros seres vivos en Pico Truncado.
Su última gran exposición pública fue en el Paseo de las Esculturas de Buenos Aires, donde rindió un homenaje al trabajo de la aeroposta francesa, que fueron pioneros en el correo aéreo en el continente americano.
Clarín