Marita de Bairos Moura Novillo ha conservado durante años la portada de la edición Nº 39 de El Tribuno revista, correspondiente al 27 de abril hasta el 4 de mayo de 1969. En esa tapa sale retratada por el fotógrafo Antonio Magna, quien le dedicó esta leyenda: “Una mirada por mitades limpia y ansiosa. La ansiedad de querer anticiparse a la vida y beberla hasta las últimas instancias, a modo de reafirmación de la plena juventud. Marita de Bairos Moura Novillo transita esta semana cándidamente vestida, proyectando sus esperanzas”.
Así daba cuenta Magna de una época en la que cumplir 15 años no solo era un momento bisagra para la quinceañera -“hoy guardo en mis brazos la estrella divina que fue mi niñez y hoy mi adolescencia con alas de ángel se eleva hacia el cielo por primera vez”-, sino que a los ojos de la sociedad se dejaba atrás un mundo y se adentraba en otro. “El señor Magna les propuso a mis padres hacerme la foto para el diario. Yo no tenía mucho interés porque estaba en la edad de la juventud, en la que todo te da vergüenza”, contó Marita a este medio. Tanta fue su timidez que negó haber sido ella -aunque era imposible hacerlo- la retratada en la imagen. “No tenía conciencia de la repercusión que después tendría. Mis compañeras y profesoras me preguntaban si era yo y les decía que no. Mis padres habían comprado muchas ediciones para enviárselas a nuestros parientes que vivían en Buenos Aires”, agregó. Contó también que sus padres, María Esther Novillo y Carlos de Bairos Moura, compraban el diario todos los días porque tenían dos negocios: la casa de electrodomésticos De Bairos Moura & Cía. y la joyería Baimour. Magna capturó a Marita usando un vestido corto cuyas suaves líneas se adaptan a su cuerpo sin hacer énfasis en el busto o la cintura y con un escote alto típico de los 60 que le otorgaba una pudorosa apariencia.
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Marita de Bairos Moura Novillo ha conservado durante años la portada de la edición Nº 39 de El Tribuno revista, correspondiente al 27 de abril hasta el 4 de mayo de 1969. En esa tapa sale retratada por el fotógrafo Antonio Magna, quien le dedicó esta leyenda: “Una mirada por mitades limpia y ansiosa. La ansiedad de querer anticiparse a la vida y beberla hasta las últimas instancias, a modo de reafirmación de la plena juventud. Marita de Bairos Moura Novillo transita esta semana cándidamente vestida, proyectando sus esperanzas”.
Así daba cuenta Magna de una época en la que cumplir 15 años no solo era un momento bisagra para la quinceañera -“hoy guardo en mis brazos la estrella divina que fue mi niñez y hoy mi adolescencia con alas de ángel se eleva hacia el cielo por primera vez”-, sino que a los ojos de la sociedad se dejaba atrás un mundo y se adentraba en otro. “El señor Magna les propuso a mis padres hacerme la foto para el diario. Yo no tenía mucho interés porque estaba en la edad de la juventud, en la que todo te da vergüenza”, contó Marita a este medio. Tanta fue su timidez que negó haber sido ella -aunque era imposible hacerlo- la retratada en la imagen. “No tenía conciencia de la repercusión que después tendría. Mis compañeras y profesoras me preguntaban si era yo y les decía que no. Mis padres habían comprado muchas ediciones para enviárselas a nuestros parientes que vivían en Buenos Aires”, agregó. Contó también que sus padres, María Esther Novillo y Carlos de Bairos Moura, compraban el diario todos los días porque tenían dos negocios: la casa de electrodomésticos De Bairos Moura & Cía. y la joyería Baimour. Magna capturó a Marita usando un vestido corto cuyas suaves líneas se adaptan a su cuerpo sin hacer énfasis en el busto o la cintura y con un escote alto típico de los 60 que le otorgaba una pudorosa apariencia.
Marita de Bairos Moura Novillo salió a los 15 años en una revista de El Tribuno fotografiada por Antonio Magna.
Marita había tenido su fiesta de 15 en un salón muy reconocido por aquel entonces y volvió a lucir su vestido para la foto. Ahora durante la nota hizo un paréntesis para relatar que hace unos años había hecho amoldar la prenda para que su hija Verónica la usara en el casamiento de una prima y que le hace ilusión que en el futuro lo luzca su nieta Victoria, hoy de 8 años. Las prendas familiares trascienden generaciones, también el diario El Tribuno, en cuyas páginas sociales salió Marita con su esposo Roberto cuando se casaron en mayo de 1973 y también quedaron registrados momentos importantes de dos de los hijos de ambos. El 2 de julio de 2016 el martillero público y corredor de comercio Carlos Auza de Bairos Moura apareció hablando sobre su profesión en la sección Lo mío es y la licenciada en Comunicaciones Sociales Inés Auza de Bairos Moura fue entrevistada el 11 de mayo de 2019, a propósito de su representación de la provincia en una visión federal del noticiero de la TV Pública. “Fue una sorpresa para mí que salieran en el diario más importante de Salta. Me enorgulleció porque hablaban de su profesión y tras esas notas realmente avanzaron en sus vidas”, señaló Marita.