El viceministro de Salud bonaerense Nicolás Kreplak aseguró que, en base a los datos actuales, en 15 días llegaríamos a 50 mil casos diarios de COVID-19 a nivel país. Panorama adverso del que Salta no estará exenta.
En la antesala, el presidente Alberto Fernández aseguró que el sistema sanitario se había “relajado”, en referencia a las camas destinadas a atender otras patologías. Los datos locales confirman los dichos del presidente, aunque se advierte que se debe a diferentes causas, la mayoría casi inevitables por estar hace un año dilatando las atenciones de otras enfermedades.
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El viceministro de Salud bonaerense Nicolás Kreplak aseguró que, en base a los datos actuales, en 15 días llegaríamos a 50 mil casos diarios de COVID-19 a nivel país. Panorama adverso del que Salta no estará exenta.
En la antesala, el presidente Alberto Fernández aseguró que el sistema sanitario se había “relajado”, en referencia a las camas destinadas a atender otras patologías. Los datos locales confirman los dichos del presidente, aunque se advierte que se debe a diferentes causas, la mayoría casi inevitables por estar hace un año dilatando las atenciones de otras enfermedades.
En el hospital Del Milagro, por ejemplo, si bien el movimiento es dinámico con días con mayores demandas que otras, la Unidad de Terapia Intensiva (UTI) está completa. Se manejan con una demanda de "cama caliente", es decir que apenas se desocupa una cama, se vuelve a ocupar. "El gran problema, más allá de la presencia de COVID, es que las patologías habituales siguen siendo el corriente del hospital", indicó Julio Garzón, gerente del nosocomio. El Milagro cuenta con 12 camas en UTI y el 50% son para pacientes COVID. "Pero si llegaran a ser más pacientes COVID que los pacientes habituales, se ocupan", explicó Garzón.
El hospital del Milagro tiene su anexo COVID por calle Rivadavia que cuenta con 27 camas para cuadros leves. "Ahí el número de casos se mantuvo en un promedio de 10 pacientes por día", indicó el médico, quien aseguró que para pacientes moderados la situación es estable. No así para los cuadros que se complican: "El problema es con los que demandan UTI, esa capacidad de cama en todo el ámbito de la salud está disminuida", afirmó Garzón que además advirtió que durante un año se mantuvo la exclusividad del sistema de salud para la pandemia. Situación que llevó a que ahora se sumen atenciones de las patologías en las que se especializa el hospital; además de los pacientes post covid que también demandan atención.
Hospital San Bernardo
En el hospital San Bernardo, la situación es la misma. El año pasado puso a disposición 170 camas, algo que ahora dudan que puedan hacerlo. "Fuimos el mayor soporte, pero este año se nos hace imposible porque hay circulación en la ciudad, hay todo tipos de accidentes, viales y de trabajo que son nuestras especialidades y que acceden al hospital y ocupan una cama", indicó Pablo Salomón, gerente del nosocomio. A la misma altura, el año pasado, el hospital cabecera tenía el 40% de camas desocupadas, hoy, en la antesala de la segunda ola la desocupación oscila entre un 20 y un 10%. "O sea que las camas disponibles que tenemos son muy poquitas", advirtió
Por otro lado, Salomón expresó su molestia por los dichos del presidente. "Venimos trabajando hace un año incansablemente", resaltó en cuanto a que cuando bajó la demanda de pacientes COVID, se dedicaron a atender otras patologías. "Nosotros tenemos una demanda contenida de 1 año, aumentó la pancreatitis aguda, por ejemplo. La pandemia nos hizo que le brindemos mayor atención a afecciones respiratorias. Esto hizo que la gente no consulte, que las patologías quirúrgicas que en su momento fueron electivas, pasaran a ser ahora no electivas", advirtió el médico.