Con el objetivo de lograr soluciones concretas para las familias que se encuentran viviendo en condiciones muy precarias en los asentamientos que hay en Metán, autoridades municipales y provinciales, comenzaron a analizar la posibilidad de que puedan ser reubicadas en tierras fiscales aptas para ser habitadas y luego sean dotadas de servicios básicos.
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Con el objetivo de lograr soluciones concretas para las familias que se encuentran viviendo en condiciones muy precarias en los asentamientos que hay en Metán, autoridades municipales y provinciales, comenzaron a analizar la posibilidad de que puedan ser reubicadas en tierras fiscales aptas para ser habitadas y luego sean dotadas de servicios básicos.
El jueves, el intendente José María Issa, mantuvo una reunión con el secretario de Tierras y Bienes del Estado, Esteban Carral, el equipo técnico de esa Secretaría y de Inmuebles de la provincia. "La reunión fue muy fructífera para avanzar en la búsqueda de soluciones", dijo Issa a El Tribuno.
"No avalo la toma de tierras, pero en Metán hay mucha necesidad en ese sentido y la realidad es que hay que trabajar en la búsqueda de soluciones concretas. No voy a hacer política con esta problemática. La gente me eligió para dar respuestas y soluciones reparadoras a estos problemas históricos que tiene la ciudad", dijo.
"Lo que he planteado concretamente es sobre algunos terrenos fiscales que tenemos identificados para que en estos lugares se hagan desarrollos urbanos, lotes con servicios, siempre y cuando tengan la factibilidad para ser habitados. Todo esto dentro del Plan Mi Lote", destacó el jefe comunal.
Seis asentamientos
Issa reconoció que uno de los inconvenientes más grandes que tiene Metán son los seis asentamientos que hay en distintos sectores. "No podemos crecer en base a la existencia de estos asentamientos porque no corresponde. Sabemos que a mucha gente no le quedó otra opción e ingresaron en terrenos en la márgenes de los ríos Metán y Conchas y al frente del barrio 48 Viviendas, que fueron los últimos", detalló.
También hay asentamientos en el barrio Los Sauces, en Virgen Del Valle y en Los Laureles.
"Mi mayor anhelo y lo que corresponde es que todas estas familias puedan vivir dignamente en terrenos que puedan contar con servicios de agua, luz, gas y cloacas y en los que puedan edificar", dijo Issa.
El jefe comunal dijo que ya mantuvo reuniones con algunas de las familias que están en asentamientos y les hizo conocer su postura. "Voy a buscar una solución para todas las familias, con el apoyo del Gobierno de la Provincia. La necesidad de casas y la falta de terrenos es una realidad", agregó.
Las últimas tomas
Hace más de un mes 52 familias se asentaron en el sector que da hacia la margen norte del río Metán, al sur de la ciudad. El lugar parece un barrio integrado por precarias estructuras levantadas con palos y con plásticos de silos bolsa.
Esto saca a la luz, una vez más, el déficit habitacional que existe y la necesidad de muchos vecinos humildes de contar con un terreno para lograr su casa propia.
En la zona se encuentra el puente del río Metán, en la ruta nacional 9/34. Hacia el este hay un camino vecinal que se extiende hasta el puente del ferrocarril. En todo ese sector las personas levantaron precarias viviendas y chozas con carpas de camping en el interior. Es un sector de monte, ubicado cerca de un molino harinero, en el que no cuentan con ningún servicio básico como agua y luz.