18°
29 de Abril,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Ideologías que terminan siendo muy destructivas

Jueves, 03 de junio de 2021 01:42

Las tendencias actuales de un grupo de dirigentes políticos ejerciendo primeras magistraturas en el mundo, se inclinan claramente a una progresiva erosión y destrucción sistemática del equilibrio social de sus pueblos. Son varios: Viktor Orban de Hungría; Narendra Modi, India; Jair Bolsonaro, Brasil; Andrés M. López Obrador, México; Miguel Díaz-Canel, Cuba; Daniel Ortega, Nicaragua... agregando en nuestro tópico, a Alberto Fernández y Cristina Fernández, Argentina. Y es por lo que The Economist, los define incursos en una vocación análoga a la inclinación hacia una necrofilia ideológica, ciertamente como parangonando a Erich From, en su Psicología Social Analítica.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Las tendencias actuales de un grupo de dirigentes políticos ejerciendo primeras magistraturas en el mundo, se inclinan claramente a una progresiva erosión y destrucción sistemática del equilibrio social de sus pueblos. Son varios: Viktor Orban de Hungría; Narendra Modi, India; Jair Bolsonaro, Brasil; Andrés M. López Obrador, México; Miguel Díaz-Canel, Cuba; Daniel Ortega, Nicaragua... agregando en nuestro tópico, a Alberto Fernández y Cristina Fernández, Argentina. Y es por lo que The Economist, los define incursos en una vocación análoga a la inclinación hacia una necrofilia ideológica, ciertamente como parangonando a Erich From, en su Psicología Social Analítica.

Es decir, gobiernos sujetos a ideas que ya han sido requete probadas y la historia ha demostrado que no funcionan en favor de los pueblos.

Agregando, la tendencia al desdén por parte de los mismos, a la repulsión a la experiencia, lo que torna a sus gobiernos incompetentes, y con consecuencias sociales muy pocos favorecedoras mientras, que en economía y materia de relaciones internacionales.

Tampoco preservan y preparan a sus países para un crecimiento sostenido, teniendo por ejemplo en cuenta actualmente, nada menos que la creciente demanda de los suministros por parte de China, tan enormes, y también, claro, de otras regiones no tan prósperas del planeta. Destaca el periódico mencionado, que esos caprichos presidenciales terminan por frenar las inversiones y el desarrollo necesitado desesperadamente por sus países involucrados, proyectando desconfianza empresarial y no credibilidad en las instituciones fundamentales de los mismos.

En nuestro caso, la Nación Argentina toda, debería revisar sin pérdida de tiempo, las complicadas y contradictorias decisiones que viene adoptando el actual Gobierno, en materia de relaciones exteriores, en la ONU, sobre Venezuela, el conflicto Israel - Palestina, y otros, tanto en lo que hace a derechos humanos, como a posicionamientos estratégicos internacionales, que debieran ser prudentes y equilibrados para favorecer a la república.

Los costos de errores cometidos en política internacional, por parte de los países, pueden sumar graves perjuicios para sus habitantes por prolongados períodos de tiempo. Así, el cuidado en el manejo en el Mercosur, los vínculos permanentes con los países latinoamericanos, las relaciones con las demás naciones occidentales, el equilibrio con potencias dominantes de regímenes dictatoriales económicamente poderosos, comprende ciertamente un indiscutido compendio, demasiado importante, ante el que la Nación Argentina debiera poner el máximo cuidado y astucia, para el mantenimiento de un balance legítimamente útil para todos sus habitantes y su futuro.

PUBLICIDAD