La pandemia de coronavirus en la Argentina ya se ha cobrado más de 103 mil víctimas fatales. Sin embargo, muchos de los que han sobrevivido a la enfermedad, de la que se va aprendiendo penosamente sobre la marcha, sufren serios trastornos de salud posteriores, desequilibrio anímico y psicológico, además de tener que soportar una crisis económica que se agudiza día a día y que especialmente a los enfermos de COVID-19 los deja con las manos atadas para ganarse el pan por los malestares que provoca la enfermedad y por el aislamiento obligatorio. Sensaciones apocalípticas; falta de perspectivas; horizonte negro, son algunos de los reflejos que devuelve este espejo de pandemia en el que nadie quiere verse, aunque todos estemos parados frente a él.
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La pandemia de coronavirus en la Argentina ya se ha cobrado más de 103 mil víctimas fatales. Sin embargo, muchos de los que han sobrevivido a la enfermedad, de la que se va aprendiendo penosamente sobre la marcha, sufren serios trastornos de salud posteriores, desequilibrio anímico y psicológico, además de tener que soportar una crisis económica que se agudiza día a día y que especialmente a los enfermos de COVID-19 los deja con las manos atadas para ganarse el pan por los malestares que provoca la enfermedad y por el aislamiento obligatorio. Sensaciones apocalípticas; falta de perspectivas; horizonte negro, son algunos de los reflejos que devuelve este espejo de pandemia en el que nadie quiere verse, aunque todos estemos parados frente a él.
Haciéndose eco de esta problemática social, el profesor Jorge Cerrutti, quien es trasplantado renal y a pesar de sus extremos cuidados contrajo COVID-19, tuvo la iniciativa de conformar en Embarcación un grupo de ayuda para personas con coronavirus, acción que llevará adelante con el apoyo de la iglesia Renacer, el hospital San Roque, el Club Central Norte, que funcionará como oficina administrativa, con voluntarios para el servicio de cadetería, con una psicóloga y otros numerosos colaboradores que entienden el peso de esta pandemia en la vida de las personas comunes, porque son sus propios vecinos. "Lamentablemente yo me contagié. Soy trasplantado renal y tengo 3 operaciones de columna. Gracias a Dios puedo contarla y quiero sacar de esta mala experiencia una iniciativa positiva, que sirva para ayudar. El contagio me resultó impensado porque creo que apliqué las medidas de prevención que nos indican las autoridades sanitarias, pero por lo visto resultaron insuficientes en mi caso. Estoy superando el coronavirus merced al formidable apoyo de mi amada familia, a los excelentes profesionales de la salud, a una gran psicóloga, a mis amigos, todos humanamente extraordinarios", expresó Cerrutti.
Agregó: "Persisten algunas secuelas, por ello es pertinente que todos sepamos lo difícil y duro que resulta tando la vivencia de la enfermedad como su superación anímica y física. El paciente con COVID-19 enfrenta otros factores que se acentúan en aquellos que no poseen un ingreso mensual por su trabajo, que es un amplio sector social, y que necesitan de una acción solidaria del Estado y de la gente. Por ello surgió la iniciativa de conformar en Embarcación el grupo de ayuda para personas con COVID-19".
"Para hacer realidad esta iniciativa tenemos una lista abierta de cosas necesarias para que las personas que empaticen con esta problemática y puedan ayudar lo hagan aportando lo que esté a su alcance. Pueden escribir al Whatsapp de 3875526975 o al 3872197512 para que pasemos a retirar la ayuda, previo registro. También pueden acercar la ayuda personalmente al Club Central Norte de Embarcación donde también se consignará el registro del aporte", explicó.
Lo que piden como ayuda
Jorge Cerrutti explicó que mientras estuvo enfermo con coronavirus, enfermedad que le dejó secuelas que está tratando, pudo entender las necesidades de personas sin recursos que atraviesan la enfermedad. Por eso piden: mercadería no perecedera: arroz, harina, azúcar, miel, etc.
Mercadería perecedera: carne, lácteos, frutas, verduras, etc. Artículos para higiene personal: barbijos, alcohol, toallas húmedas, guantes de látex, etc
Artículos para la higiene del hogar: lavandina, desinfectante, sanitizante, etc. Artículos descartables: vasos, cubiertos, servilletas, etc.