En el marco de la investigación del asesinato del peluquero Víctor René Córdoba se desató una verdadera "batalla legal" con criterios diferentes entre el Poder Judicial y el Ministerio Público Fiscal sobre la detención de la suegra de la víctima, Mariela Cuevas, quien fue aprehendida y luego liberada debido a que no hubo imputación por parte de la Fiscalía interviniente.
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En el marco de la investigación del asesinato del peluquero Víctor René Córdoba se desató una verdadera "batalla legal" con criterios diferentes entre el Poder Judicial y el Ministerio Público Fiscal sobre la detención de la suegra de la víctima, Mariela Cuevas, quien fue aprehendida y luego liberada debido a que no hubo imputación por parte de la Fiscalía interviniente.
Ante la liberación de la mujer el abogado querellante, de la familia de la víctima, Federico Delgado, presentó ayer en la Unidad Fiscal que ahora investiga el caso, integrada por los fiscales Nicolás Rodríguez y Gonzalo Gómez Amado, un pedido formal de imputación de Cuevas. "Se encuentra acreditado sobradamente que la señora Mariela Soledad Cuevas estuvo perfectamente situada en la escena del crimen", dijo Delgado en la presentación del documento.
En la jornada de ayer declaró el médico traumatólogo Pedro Samsón, quien asistió a la víctima y aseguró a El Tribuno que las lesiones que presentaba el peluquero "son incompatibles con un suicidio". Teoría, la del suicidio, que no tardó en aparecer tras lo ocurrido con Córdoba en la ciudad de Metán.
Samsón en su declaración en la Fiscalía dijo que Córdoba presentaba rasguños en la espalda producidos por roces con un elemento de borde afilado o arañazos que dejaron visibles excoriaciones superficiales. En la cabeza dijo que tenía varios hematomas y un traumatismo de cráneo grave con una posible rotura axonal difusa. También presentaba un corte en el cuello y otro a la altura de la ceja derecha, sostuvo.
"Estaba entubado, medicado y estabilizado cuando le realicé el examen traumatológico en la segunda etapa de valoración de las lesiones que presentaba. Se encontraba estabilizado y luego fue trasladado a Salta capital", expresó Samsón, quien fue uno de los profesionales que atendió al peluquero en el hospital Del Carmen.
Por el hecho permanecen detenidos e imputados por el delito de homicidio calificado la esposa de Córdoba, Macarena Peralta, de 25 años, y el suegro del peluquero, José Luis "Gallina" Peralta, de 59. Víctor Córdoba murió el 22 de abril pasado tras agonizar durante cuatro días en el hospital San Bernardo, donde tuvo que ser trasladado luego de la golpiza que recibió en la que sufrió un grave traumatismo de cráneo, entre otras lesiones que le provocaron la muerte.
Teoría del suicidio
El inicio de la investigación fue confuso debido a que el mismo lunes 18 de abril, luego de los sucesos ocurridos en la casa de la familia Peralta, en el barrio Parque de Metán, a las 17.03, Macarena Peralta radicó una denuncia por violencia de género y amenazas en contra de su esposo, Víctor Córdoba, en la comisaría 30 de Metán.
En la denuncia apuntó que su padre, José Luis Peralta, le entregó un celular de su pareja, quien lo tenía escondido porque se mandaba mensajes y fotos con otra mujer.
Macarena dijo que le reclamó a Córdoba y que luego le pidió que se retirara del domicilio y que el joven, ahora fallecido, comenzó a alterarse y rompió el vidrio de una ventana. Denunció que luego agarró un cuchillo de la cocina con el que amenazaba con quitarse la vida. Posteriormente relató que su padre logró quitarle el cuchillo y que Víctor intentó autolesionarse con los vidrios y que José Luis Peralta también se los quitó.
La denunciante aseguró que Córdoba cuando se retiró del inmueble dijo: "Si no me mato voy a volver a hacer cualquier cosa o a quitarte la criatura", en referencia al hijo que tuvieron con su esposa Macarena Peralta y que vivía con ellos en la casa en la que ocurrieron los incidentes. La mujer contó que posteriormente Víctor llamó por teléfono a su padre y que le manifestó que se mataría.
Resolución del juez
Mariela Cuevas, suegra del peluquero Córdoba, había sido detenida el lunes de la semana pasado y recuperó la libertad el viernes siguiente, debido a que el fiscal Gonzalo Gómez Amado no la imputó.
En un procedimiento inusual, sin precedentes en el Distrito Judicial del Sur, el abogado querellante, Federico Delgado, había solicitado la detención directamente al Juzgado de Garantías 2, que está a cargo en forma interina del experimentado juez, Mario Herminio Teseyra. El abogado fundamentó que lo hizo ante la falta de respuestas de la Fiscalía. Teseyra hizo lugar al pedido y ordenó la detención de Cuevas, pero luego la tuvo que liberar ante la falta de acusación por parte del fiscal Gómez Amado.
En su resolución, a la que tuvo acceso El Tribuno, el juez Teseyra destacó que "es atinado remarcar nuevamente que la Sra. Cuevas se encontraba dentro del domicilio el día que ocurrieron los hechos, compartiendo en este punto el criterio de la parte querellante, resultando necesario prevenir cualquier condicionamiento que pudieran sufrir los testigos, circunstancia de habitual configuración en el tipo de delito que se investiga en la presente causa, donde las especiales características del hecho investigado requieren por parte del órgano de la acusación una tarea investigativa y de búsqueda de elementos de convicción donde la libertad de la Sra. Cuevas durante la misma implicaría un factor de entorpecimiento".
"Que efectivizada la detención de la Sra. Cuevas y posteriormente a la realización del control de legalidad correspondiente (ver fs. 223) la misma no es recibida por el Fiscal Penal interviniente, quien a fs. 229/230 presenta un escrito donde hace conocer a este Juzgado de Garantías que hasta el momento no cuenta con elementos de convicción suficientes como lo exige el código de fondo (Art. 386 del C.P.P.) para solicitar la detención de la Sra. Cuevas", señaló el magistrado en la resolución en la que ordenó, el viernes pasado, la liberación de la suegra del peluquero.
No hubo imputación
"Que de conformidad a las constancias de autos surge que el Fiscal interviniente tuvo a la detenida a su disposición en alcaldía general y no le realizó imputación alguna, entiende el proveyente que corresponde sin más ordenar que la misma recupere la libertad. Arriba a esta conclusión el suscripto, tras analizar meticulosamente la presente causa, de donde surge claramente la voluntad del fiscal de no realizar imputación alguna en contra de la Sra. Cuevas ni de seguir la línea investigativa propuesta por el querellante quedándole a este último la instancia prevista en el cuarto párrafo del Art. 108 del C.P.P. que establece claramente que si el Fiscal Penal se negara a investigar los hechos contenidos en la querella, formulará Decreto de Desestimación, entonces la víctima podrá solicitar la revisión ante el Fiscal de Impugnación, el que deberá ordenar a otro fiscal que inicie la investigación si ello correspondiere", destacó el magistrado.
Destacó que "ya que con las recientes modificaciones que se han trabajado se avanza a que se escuche a la víctima, a que tenga una participación activa en el proceso, a que participe a la par del fiscal. Pudiendo hacerlo junto al fiscal o de manera independiente, porque puede ser que la querella no esté de acuerdo con las acciones que lleva adelante el fiscal como ocurre en este caso", concluyó Teseyra al disponer la inmediata liberación de Mariela Karina Soledad Cuevas.