A pesar del tiempo transcurrido, el dolor siguió intacto hasta que en el ocaso de una jornada más, escuchó la voz de quien le arruinó su niñez. Salió corriendo de donde estaba y, al llegar a su casa, expulsó ese amargo y triste nudo que la había acompañado por casi una década. Le contó a sus padres el calvario que tuvo que soportar al ser abusada sexualmente por un hombre. Consternados por la noticia sus progenitores radicaron la denuncia. Es una de tantas historias que pululan silenciosamente en Salta, muchas sin salir a la luz, donde los abusos infantiles de todo tipo atraviesan la provincia de una punta a otra. El jueves 2 de este mes la madre de una menor radicó la denuncia contra un almacenero del barrio Vicente Solá, acusado de abuso sexual.
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A pesar del tiempo transcurrido, el dolor siguió intacto hasta que en el ocaso de una jornada más, escuchó la voz de quien le arruinó su niñez. Salió corriendo de donde estaba y, al llegar a su casa, expulsó ese amargo y triste nudo que la había acompañado por casi una década. Le contó a sus padres el calvario que tuvo que soportar al ser abusada sexualmente por un hombre. Consternados por la noticia sus progenitores radicaron la denuncia. Es una de tantas historias que pululan silenciosamente en Salta, muchas sin salir a la luz, donde los abusos infantiles de todo tipo atraviesan la provincia de una punta a otra. El jueves 2 de este mes la madre de una menor radicó la denuncia contra un almacenero del barrio Vicente Solá, acusado de abuso sexual.
Al parecer no sería la primera vez que el sujeto denunciado, un hombre de 72 años identificado con las iniciales E.B.L., abusó sexualmente de la niña de 7 años. Según fuentes vinculadas al caso, el septuagenario ya habría actuado en otras oportunidades. De acuerdo a lo denunciado, el hecho ocurrió el jueves 2 del corriente mes en un negocio ubicado en la calle Zuviría al 2400, casi esquina Mariano Benítez, comercio que era atendido por su dueño, el hombre acusado.
La madre de la víctima contó que esa tarde noche le había pedido a su hija que fuera a comprar al almacén del barrio, ubicado a metros de su vivienda. Habían pasado apenas algunos minutos de las 19 cuando la niña salió de su casa hacia el negocio, donde la esperaba el comerciante de 72 años, acusado de haber abusado sexualmente de ella.
Tras varios minutos de ausencia, la mujer salió en busca de su hija. Al llegar al negocio se sorprendió porque el comerciante había ingresado a la niña al interior del mismo, donde habría abusado de la menor tocando sus partes íntimas y besándola en la boca.
Inmersas en un universo de angustia y tristeza, la víctima y su madre regresaron a la vivienda donde la menor habría contado que no fue la primera vez que era sujeta a semejante aberración. Esa misma noche la progenitora radicó la denuncia en la comisaría 3ra.
Intervención fiscal
Una vez radicada la denuncia, el sujeto fue demorado e intervino la fiscal penal de la Unidad de Delitos contra la Integridad Sexual 2 desde donde solicitaron la revisión médica de la menor. Desde el Juzgado de Garantías 8va. Nominación dieron lugar a lo solicitado y detuvieron a E.B.L. (72). La causa pasó al fiscal penal 1 de la UDIS, a cargo de Federico Obeid. Desde el pasado jueves 2 el acusado se encuentra en la Alcaidía General.
Acerca de la denuncia, el Ministerio Público informó ayer: "Ante la demora fue a buscar a su hija y observó cuando la menor era sacada del brazo del interior del local por el hombre".
"La mujer contó que, al preguntarte a su hija qué sucedía, esta rompió en llanto y le contó que el almacenero la había sometido a tocamientos en sus partes íntimas y que no era la primera vez que sucedía", señalaron desde el MPF.
Escrache de vecinos
Luego de enterarse del espeluznante suceso, vecinos del barrio Vicente Solá no dudaron en reunirse y convenir una movilización hasta la casa del comerciante, a quien señalan como el abusador de una niña de 7 años. Fue así que el miércoles por la noche realizaron un escrache afuera del comercio sobre calle Zuviría al 2500, los carteles rezaban “Los niños no se tocan”.
La movilización de vecinos en el barrio fue pacífica y, según señalaron, sirvió para hacer visible un hecho aberrante. Además de los carteles repudiando y acusando al comerciante, también hubo pintadas en las paredes del domicilio del acusado, quien desde el jueves pasado se encuentra detenido.