El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó ayer que los bombardeos contra la Franja de Gaza, que ya dejaron 1.700 muertos, eran "solo el inicio" de la respuesta a la sangrienta ofensiva de Hamas contra Israel del 7 de octubre.
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El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó ayer que los bombardeos contra la Franja de Gaza, que ya dejaron 1.700 muertos, eran "solo el inicio" de la respuesta a la sangrienta ofensiva de Hamas contra Israel del 7 de octubre.
"Nuestros enemigos apenas empezaron a pagar el precio. No puedo divulgar lo que viene a continuación, pero les diré que esto solo es el inicio", declaró Netanyahu en un discurso a la nación.
El premier israelí prometió destruir a Hamas, tras reunirse el jueves en Tel Aviv con el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken.
El Ejército israelí informó ayer que fueron atacadas 750 "posiciones militares", entre ellas "residencias de terroristas de alto rango utilizadas como centros de mando militar".
Además, se registraron "bombardeos masivos" en el campamento de Al Shati, el mayor de la Franja de Gaza
Abbas y el exilio de 1948
Por su parte, el presidente palestino Mahmud Abbas rechazó ayer el desplazamiento masivo de palestinos en la Franja de Gaza, que comparó con el exilio de 1948, medida ordenada por el Ejército israelí en medio del enfrentamiento desatado entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamas.
Abbas rechazó "totalmente el desplazamiento" de palestinos de la Franja de Gaza, "porque esto sería una segunda Nakba ("catástrofe" en árabe) para nuestro pueblo".
La Nakba, o "catástrofe", se refiere a los 760.000 palestinos que huyeron o fueron expulsados de sus hogares durante la guerra de 1948, que coincidió con la creación de Israel.