Al menos diez familias identificadas con sectores del kirchnerismo local tomaron terrenos cercanos a la rivera del río Toro justo donde maquinaria de vialidad de la provincia comenzó los trabajos de la extensión de la ruta nacional 51. Este miércoles la policía debió cerrar el camino de ripio, solo habilitado para los camiones, a los fines de evitar nuevas usurpaciones.
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Al menos diez familias identificadas con sectores del kirchnerismo local tomaron terrenos cercanos a la rivera del río Toro justo donde maquinaria de vialidad de la provincia comenzó los trabajos de la extensión de la ruta nacional 51. Este miércoles la policía debió cerrar el camino de ripio, solo habilitado para los camiones, a los fines de evitar nuevas usurpaciones.
Las familias lideradas por dos mujeres, llegaron a instalarse sobre el ingreso de una cantera cercana al río, y a los pocos minutos, luego de verificar que no eran las tierras donde se comenzó a remover el terreno para la nueva ruta, trasladaron a los integrantes hasta los terrenos colindantes entre Barrio San Jorge y río Toro.
Con gazebos, palos y plásticos armaron la usurpación delante de una maquina de vialidad de la provincia. La policía al entrevistarse con los lideres reclamaron “por lotes en estas tierras fiscales”. Los efectivos al advertir que estaban impidiendo los trabajos sobre la nueva ruta, la respuesta fue contundente “nos nos vamos a ir hasta que nos den soluciones”.
En esa zona, el plan de obra, abarca la ejecución de una ruta alternativa en Campo Quijano, que unirá la ruta nacional 51 con la ruta provincial 36, para evitar el tránsito pesado por el centro del pueblo.
Los trabajos comenzaron hace una semana en esta área que bordea la rivera del Toro en el oeste de Campo Quijano. Por aquí será el paso obligado para las empresas mineras radicadas en La Puna salteña. Los trabajos quedaron de la maquinaria pesada se pararon apenas las familias usurparon estas tierras.