Este jueves Tigre recibe a San Pablo por Copa Sudamericana en el estadio José Dellagiovanna. Sin embargo, antes del compromiso se vivió una polémica situación ya que los hinchas argentinos atacaron el bus de su club tras confundirlo con el del rival.
El compromiso tiene un trasfondo histórico, debido a que ambos equipos chocaron en la final de la misma competición en 2012. En la ida terminaron 0 a 0, pero en la vuelta disputada en Morumbí la bronca fue evidente y solo se pudo jugar un tiempo que terminó 2 a 0 a favor de los locales.
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En el entretiempo los jugadores argentinos señalaron la seguridad del estadio los emboscó con armas y los agredieron. Tras no presentarse la terna chilena decidió dar por finalizado el compromiso y los paulistas celebraron el título continental.
Es por eso que se esperaba que el encuentro de esta noche en Argentina fuera muy violento y se recomendó que niños y mujeres no asistieran al compromiso. El ataque al bus de Tigre así lo demostró pese a que no era el objetivo buscado.
