El pico de casos de enfermedades respiratorias que obligó a las autoridades a suspender las cirugías en el hospital público Materno Infantil no se registra solamente en la capital salteña, sino también en localidades del interior provincial.
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El pico de casos de enfermedades respiratorias que obligó a las autoridades a suspender las cirugías en el hospital público Materno Infantil no se registra solamente en la capital salteña, sino también en localidades del interior provincial.
En el hospital "Dr. Joaquín Castellanos", de General Güemes, el promedio de consultas por casos respiratorios en la guardia rondaba en más del 60 por ciento el viernes pasado. La ocupación de camas variaba entre un 30 y 40 por ciento en el sector pediatría. "No nos sobrepasa la demanda. Tenemos lo esperado", manifestó el gerente del hospital, Domingo Montiel.
Añadió que la presencia del virus sincicial respiratorio es la característica principal y recomendó a la comunidad realizar la consulta precoz, evitar la automedicación, no esperar los fines de semana para buscar atención ante síntomas y acudir a la guardia si se ve una evolución desfavorable.
El doctor Montiel expresó que para los días más fríos se espera mayor afluencia de pacientes, por lo que tratan de contar con los insumos para farmacia e internaciones de sala suficientes. El hospital de Güemes no cuenta con terapia pediátrica, por lo que los casos muy complejos son evaluados y derivados al Materno Infantil de la capital salteña, en caso de ser necesario.
En el norte provincial el clima por ahora favorece. Aún no hubo días muy fríos. En el hospital San Vicente de Paúl, de Orán, si bien se observa mayor demanda y se registran muchas consultas en la guardia por cuadros respiratorios, no quedan pacientes internados, aunque las autoridades esperan que pronto lleguen más casos respiratorios, con el cambio de clima.
En el sur
En Metán, donde si bien la atención en el Hospital del Carmen es normal con respuesta a toda la demanda y no se suspendieron otras actividades como en el Materno, preocupan los cuadros respiratorios asociados a coqueluche (tos convulsa).
Generalmente son los niños los más afectados y sus padres o tutores los llevan a la guardia de pediatría. Un 80 por ciento de las consultas son respiratorias. No todas de gravedad, varios pacientes habían quedado internados hace días atrás. El viernes no había chicos internados por causas respiratorias, todos habían recibido el alta.
La doctora Ximena Iñíguez, quien está a cargo del servicio de Epidemiología del Hospital del Carmen, explicó que en lo que va del año registraron casos de virus sincicial asociado con coqueluche. "Muchos casos tienen esta asociación. Otros fueron de virus sincicial con COVID, por ejemplo, dos niños, y ayer (por el viernes) llegó por primera vez un caso de gripe A", precisó.
Es decir, el origen de los cuadros respiratorios es variado, aunque la sintomatología es similar. Se trata de cuadros que pueden producir bronquitis, bronquiolitis o neumonía. El principal síntoma es la fiebre. Algunas pequeñas características clínicas los pueden diferenciar, pero como son parecidos se debe hacer el diagnóstico por laboratorio para reconocer el agente causal de la patología.
Hace dos semanas, el Ministerio de Salud había enviado un alerta por coqueluche. Es una enfermedad infecciosa aguda, contagiosa, causada por la bacteria bordetella pertussis.
Según el Boletín Epidemiológico del Ministerio de Salud de la Provincia de Salta, en la última semana reportada, la 21, hubo 14 casos, mientras que en la semana 20 se había registrado 25. Los casos acumulados este año son 112.
Precisamente, 22 de los casos se dieron en Metán, en lo que va de este año, confirmados por laboratorio. El año pasado el brote se había dado a mediados de junio. Este año se adelantó.
La importancia de la vacunación
La característica que tiene la coqueluche es que es una enfermedad inmunoprevenible. "Entonces lo que hacemos es controlar que estén bien vacunados los niños, que la población tenga los carnet completos", precisó la doctora Iñíguez.
La situación pueden complejizarse en los bebés, sobre todo menores de dos meses, ya que aún no cuentan con vacunas porque a partir de esa edad comienzan las aplicaciones. Por este motivo, los especialistas hacen hincapié en la importancia de las medidas de prevención y el cuidado de los niños. No se los debe exponer al frío, en aglomeraciones de gente y se debe evitar que tengan contacto con personas enfermas. La higiene de manos es clave.