Personal de
Gendarmería de la provincia de
Salta buscó infructuosamente ayer en un cementerio de la localidad santiagueña de
Gramilla, departamento de Jiménez, a la joven
María Cash, desaparecida en el 2011 en el norte del país.
Tras varias horas de búsqueda, las autoridades confirmaron que los restos que se verificaron no pertenecen a la joven, que al momento de desaparecer tenía 29 años.
Los uniformados llegaron ayer al lugar, porque trascendió que la joven podría haber sido sepultada en una tumba NN de ese cementerio.
La búsqueda se realizó por disposición del juez federal de Salta, Miguel Antonio Medina, y fue llevada a cabo por personal de la Unidad Especial de Investigaciones y Procedimientos Judiciales de Gendarmería Nacional. El juez Medina también solicitó que se realizaran todas las averiguaciones necesarias para obtener registros de las tumbas sin identificación en la comisaría local, en el Registro Civil y en los archivos de los hospitales de la zona, además de recolectar varios testimonios.
María Cash desapareció tras partir el 4 de julio de 2011 desde la terminal de Retiro hacia la provincia de Jujuy, para dirigirse a la casa de un amigo. Lo último que se sabe con certeza es que varios kilómetros antes, en la ciudad salteña de Rosario de la Frontera, bajó del ómnibus porque se sentía "incómoda".
Posteriormente, se comprobó que hizo dedo al menos a una camioneta y a un camión, que la transportaron en primer lugar hacia el este y luego al sur, en dirección a Santiago del Estero, en medio de un extraño periplo. El último contacto de la joven con sus allegados se concretó el 8 de julio del mismo año, por mail.
Durante siete meses, fue la Justicia provincial salteña la que llevó la causa principal, aunque a pedido de la familia también tomó intervención la jueza federal porteña María Servini de Cubría. En abril del año pasado falleció Federico Cash, padre de María, en un accidente en La Pampa, a donde había ido siguiendo posibles pistas sobre el paradero de su hija.
Personal de
Gendarmería de la provincia de
Salta buscó infructuosamente ayer en un cementerio de la localidad santiagueña de
Gramilla, departamento de Jiménez, a la joven
María Cash, desaparecida en el 2011 en el norte del país.
Tras varias horas de búsqueda, las autoridades confirmaron que los restos que se verificaron no pertenecen a la joven, que al momento de desaparecer tenía 29 años.
Los uniformados llegaron ayer al lugar, porque trascendió que la joven podría haber sido sepultada en una tumba NN de ese cementerio.
La búsqueda se realizó por disposición del juez federal de Salta, Miguel Antonio Medina, y fue llevada a cabo por personal de la Unidad Especial de Investigaciones y Procedimientos Judiciales de Gendarmería Nacional. El juez Medina también solicitó que se realizaran todas las averiguaciones necesarias para obtener registros de las tumbas sin identificación en la comisaría local, en el Registro Civil y en los archivos de los hospitales de la zona, además de recolectar varios testimonios.
María Cash desapareció tras partir el 4 de julio de 2011 desde la terminal de Retiro hacia la provincia de Jujuy, para dirigirse a la casa de un amigo. Lo último que se sabe con certeza es que varios kilómetros antes, en la ciudad salteña de Rosario de la Frontera, bajó del ómnibus porque se sentía "incómoda".
Posteriormente, se comprobó que hizo dedo al menos a una camioneta y a un camión, que la transportaron en primer lugar hacia el este y luego al sur, en dirección a Santiago del Estero, en medio de un extraño periplo. El último contacto de la joven con sus allegados se concretó el 8 de julio del mismo año, por mail.
Durante siete meses, fue la Justicia provincial salteña la que llevó la causa principal, aunque a pedido de la familia también tomó intervención la jueza federal porteña María Servini de Cubría. En abril del año pasado falleció Federico Cash, padre de María, en un accidente en La Pampa, a donde había ido siguiendo posibles pistas sobre el paradero de su hija.