El pago con "home banking" y con tarjeta de débito son algunas de las alternativas para manejarse sin dinero en efectivo, pero aún no todo el mundo las utiliza.
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El pago con "home banking" y con tarjeta de débito son algunas de las alternativas para manejarse sin dinero en efectivo, pero aún no todo el mundo las utiliza.
El primer ejemplo, el "home banking", viene del concepto "banco en casa", y es muy útil para el pago de cuentas e impuestos a través de internet.
Una de sus principales ventajas es que evita hacer largas filas para extraer dinero, y luego para pagar las cuentas. Además no dependen del dinero que haya en el cajero automático, ya que siempre y cuando la cuenta disponga de saldo necesario, se podrá efectuar el pago tranquilamente.
Si bien esta herramienta se presenta como muy útil, mucha gente desconfía del manejo de dinero a través de internet, por lo que prefiere los métodos tradicionales.
Por otra parte, está la tarjeta de débito que funciona de manera similar al pago en efectivo, solo que se realiza con una tarjeta muy parecida a la de crédito que descuenta, en tiempo real, el valor a pagar del saldo disponible en la cuenta bancaria.
Una de las ventajas de esta modalidad es que una gran cantidad de comercios están adheridos al sistema, y algunos ofrecen beneficios, aunque son muchas las dudas al respecto.