Un joven de 25 años que había viajado a Brasil en crucero se contagió fiebre amarilla y tuvo que ser sometido a un trasplante hepático a su regreso a Buenos Aires. A pesar de recibir el hígado de un joven que había muerto en un accidente de tránsito, se encuentra en grave estado aunque mejorando.
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Un joven de 25 años que había viajado a Brasil en crucero se contagió fiebre amarilla y tuvo que ser sometido a un trasplante hepático a su regreso a Buenos Aires. A pesar de recibir el hígado de un joven que había muerto en un accidente de tránsito, se encuentra en grave estado aunque mejorando.
Según informó el médico Claudio Zin a radio La Red, Renzo Gagliano había viajado sin vacunarse porque le habían dicho que no era necesario debido a que iban a estar pocos días en Isla Grande, cerca de Río de Janeiro.
El joven empezó a sentir síntomas compatibles con la enfermedad, como fiebre alta y la coloración amarilla característica de esta patología y luego de hacerse un chequeo en un centro de salud privado y tras detectarse la enfermedad, es derivado al Sanatorio de la Trinidad.
Gagliano fue anotado primero en la lista lista de emergencia nacional para recibir un trasplante de hígado y afortunadamente, a las pocas horas apareció un donante y pudo ser trasplantado. "Hubo solo seis trasplantes de hígado por fiebre amarilla, cinco en Brasil y ahora este caso en Argentina", indicó el médico, y agregó. "Por eso es importante vacunarse si van a viajar a Brasil".