¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

5 de Mayo,  Jujuy, Argentina
PUBLICIDAD

Con gran alegría se vivieron las honras a la Virgen de Urkupiña

El sorpresivo viento con un repentino cambio de clima no opacó la gran fiesta mariana
Martes, 16 de agosto de 2022 17:38

“Damos gracias a Dios porque en el día de la Asunción, celebramos también la advocación mariana de la Virgen de Urkupiña. El evangelio de hoy, nos invita a poner  nuestra mirada en la figura de María. Y en el día de la Asunción, nos preguntamos si María experimentó la muerte- La conclusión es que si  el hijo de Dios, Jesucristo, el hijo María murió, ella también experimentó la muerte. Cuando Jesús murió,  experimentó el misterio de la resurrección en cuerpo y alma, María al ser concebida sin pecado original, también fue elevada a la realidad de Dios, asunta al cielo.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

“Damos gracias a Dios porque en el día de la Asunción, celebramos también la advocación mariana de la Virgen de Urkupiña. El evangelio de hoy, nos invita a poner  nuestra mirada en la figura de María. Y en el día de la Asunción, nos preguntamos si María experimentó la muerte- La conclusión es que si  el hijo de Dios, Jesucristo, el hijo María murió, ella también experimentó la muerte. Cuando Jesús murió,  experimentó el misterio de la resurrección en cuerpo y alma, María al ser concebida sin pecado original, también fue elevada a la realidad de Dios, asunta al cielo.

Cuando  celebramos la Asunción de María estamos celebramos que María fue asumida, fue acogida en la vida eterna, en la familia de Dios. Y nosotros también, siguiendo esa vocación, vamos a ser recibidos, porque de Dios salimos y a Dios volveremos”. Fueron los conceptos pronunciados durante la homilía por el padre Marcelo Churquina. En otro tramo el sacerdote se refirió a la advocación de la Virgen de Urkupiña, que nació en Bolivia, cuando en Quillacollo una pastorcita fue testigo de la aparición de la Virgen en medio de los cerros, por eso se la llama “mamita del cerro”. “Dios se sigue manifestando, pero para poder hacerlo, necesita corazones simples, sencillos, humildes”, finalizó tras elevar una súplica por los devotos  fallecidos.

 La celebración central se realizó en el sector donde convergen las avenidas Tarcos y Martín Fierro del barrio Güemes, donde hace 16 años, devotos pioneros construyeron un singular santuario para la Virgen de Urkupiña.

Tras soportar una tórrida jornada con viento norte, nada hizo prever el repentino cambio del clima  que se hizo sentir con fuertes ráfagas de viento frío que provocó el corte de energía eléctrica.  Nada fue impedimento para que la gran cantidad de fieles devotos vivieran a pleno la festividad patronal que dio comienzo con el homenaje a los devotos fallecidos entre ellos, los esclavos de la Virgen, Ignacia Wierna y Gualberto Pinaya. Finalizada la misa, dio comienzo el homenaje a la Virgen,  que se hizo ofrenda en el rostro y el talento de la morenada de la familia Claros y la banda Norteña, que con coloridos trajes y la danza ancestral, precedieron el paso de la procesión con la sagrada imagen,  que fue llevada en andas por el hijo de los esclavos Alejandro Pinaya junto a su esposa Mariela Burgos y sus hijos. El joven, sostuvo que todo lo que hizo junto a su familia nació del corazón y fue para  continuar con el legado de sus padres, “no es necesario explicar todo lo que se hizo y el esfuerzo que demandó. Dios, la Virgen, lo saben y sólo espero que me bendigan, me protejan cuando salgo a la ruta a trabajar, no pido más que ver crecer felices a mis hijos. En todo lo que me sea posible seguiré colaborando con el padre y el grupo a cargo de la gruta”, dijo Alejandro Pinaya, al tiempo de agradecer a quienes brindaron su colaboración.

Momentos de gran religiosidad se vivieron durante la procesión, y al arribar al altar preparado para la ocasión, los mariachis cantaron Las mañanitas y el feliz cumpleaños a la Virgen, ante el despliegue multicolor de fuegos artificiales no sonoros. Luego, Alejandro y Mariela junto a sus hijos, invitaron a la comunidad a disfrutar de calentitas empanadas, pizzetas y riquísimas tortas. El cierre para tan sentida  festividad fue el paso de la morenada y banda de música que se inclinaron para despedirse de la  imagen que en la noche, lució sus mejores galas.