A diferencia de otras elecciones, además de los cargos ejecutivos y legislativos provinciales y municipales, ayer los jujeños eligieron a los miembros de la Asamblea Constituyente quienes serán los encargados de debatir los cambios parciales y redactar la nueva Constitución provincial.
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A diferencia de otras elecciones, además de los cargos ejecutivos y legislativos provinciales y municipales, ayer los jujeños eligieron a los miembros de la Asamblea Constituyente quienes serán los encargados de debatir los cambios parciales y redactar la nueva Constitución provincial.
Los primeros datos del escrutinio provisorio posicionaban anoche al Frente Cambia Jujuy en la categoría Convencional Constituyente con un 49,16%, espacio que llevaba a Gerardo Morales como cabeza de lista. En segundo lugar se ubicaba el Frente Justicialista con 21,95%, por lo que el exvicegobernador Guillermo Jenefes, quien se postulaba en primer término, también integrará la asamblea Constituyente. Tercero se posicionó el Frente de Izquierda con 12,61%, por lo que Natalia Morales, quien también encabezaba la lista en esa categoría, resultó electa.
Al cierre de esta edición, esos tres frentes habían lograron romper el piso electoral establecido por ley, que en Jujuy es del 5% del padrón electoral de la provincia, es decir que son los espacios políticos que habían obtenido más de 29.344 votos en toda la provincia. De estos tres espacios políticos surgirán el resto de los 48 convencionales constituyentes, bancas que se distribuirán mediante sistema D'Hondt.
Mas abajo, quedaron en cuarto lugar el frente Unidad por Jujuy con el 7,39% que, para esa categoría, llevaba como candidato a Guillermo Snopek; y le seguían Unidad por Jujuy y Vía con 3,25% quienes habían postulado en primer termino al actual diputado provincial y dirigente sindical, Luis Cabana y al ingeniero Kevin Ballesty, respectivamente.
Con los miembros de la convención constituyente ya elegidos, la asamblea se deberá conformar en los 30 días siguientes, momento a partir del cual deberá empezar sus deliberaciones y la redacción de la nueva Constitución, plazo que se extendería por 90 días, sin posibilidad de prórroga.
Cabe señalar que el cargo de convencional constituyente es ad honorem, es decir que no percibirá ninguna remuneración mientras dure su labor.
Entre los principales aspectos que se modificarán será los mandatos para cargos ejecutivos; los cortes de ruta, la prohibición de indultos para quienes cometen delitos dolosos graves, entre otros.